Desde Ecotrader seguimos en nuestros trece de que vender en pánico vendedor es un despropósito salvo que nos veamos obligados a hacerlo y eso ocurrirá si Wall Street da su brazo a torcer. Para ello es necesario que el S&P 500 (SP500.CH) pierda el soporte clave que presenta en los 2.700-2.730 puntos, que es el que esta semana está siendo puesto a prueba y que, de momento, está siendo respetado. Su pérdida invitaría a reducir drásticamente la exposición a bolsa para evitar el riesgo de asistir a un desplome en las bolsas mundiales que podría no encontrar freno hasta los mínimos que los principales índices norteamericanos marcaron en diciembre de 2018, lo que daría un recorrido adicional de las caídas en EEUU en torno a un 15%. Hasta ahí no seríamos partidarios de volver a comprar bolsa.