Cuando a comienzos del pasado mes de noviembre las principales bolsas mundiales superaron resistencias clave de medio/largo plazo ya advertimos que el Eurostoxx 50 (SX5E.ST) tenía un recorrido mínimo de subida inicial hasta los máximos que alcanzó el año 2015 en la zona de los 3.836 puntos. El alcance de este entorno resistivo (máximos del año en los 3.814 puntos) ha frenado por el momento las subidas y desde ahí todavía no descartamos que podamos ver una consolidación lateral más amplia, que en ningún caso esperamos que lleve a la principal referencia europea por debajo de soportes clave de 3.600 puntos. De hecho, consideramos que podría conformarse con buscar apoyo a la zona de los 3.700 puntos, que es por donde discurre una directriz alcista de menor pendiente a la que se perdió hace tres semanas.
Para que se aleje el riesgo de ver esta consolidación lo que exigimos es que el Eurostoxx 50 logre batir la zona de resistencia de los 3.836-3.855 puntos, que son los altos de 2015 y una resistencia creciente que si es superada estaríamos ante una señal de enorme fortaleza que invitaría a aumentar de nuevo la exposición a bolsa sin esperar una consolidación.