Situación de corto plazo:
El S&P 500 ha conseguido finalmente replicar el comportamiento del Nasdaq 100 (NDX100.NQ), tras lograr ayer marcar un nuevo alto de todos los tiempos después de batir los máximos del año pasado en los 2.940 puntos. Esto es algo que no nos sorprende dado que consideramos que el S&P500 (SP500.CH) podría buscar en próximas fechas la resistencia creciente que discurre por los 3.000 puntos, tal y como mostramos en el chart adjunto.
Esta subida adicional en el S&P 500 encajaría a la perfección con la búsqueda por parte del Nasdaq 100 de objetivos que manejamos en la resistencia psicológica de los 8.000 puntos, que además coincidiría con el objetivo que surge de proyectar la amplitud de la dilatación que tuvo el principal índice tecnológico el año pasado tras perder su soporte urbi et orbi, tal y como puede verse en el chart adjunto.
Para poner en jaque un escenario de continuidad alcista deberían de perderse al menos niveles como son los 2.870 puntos de S&P 500 y los 26.000 puntos de Dow Jones (DJI.NY).
Situación tendencial:
Los mínimos establecidos la última semana del año pasado en los índices norteamericanos, tales como son los 5.895 puntos del Nasdaq 100, los 21.712 del Dow Jones Industrial y los 2.346 del S&P 500, han sido un suelo dentro de la tendencia bajista que se inició a comienzos del pasado mes de octubre y el origen de un rebote que podría durar semanas y que lleva el camino de recuperar todo lo perdido en la última y fuerte caída. Una subida del Nasdaq 100 a los 7.700 no es para nada descartable.