Situación de corto plazo:
Lo más destacable de este comienzo de semana ha sido ver como nuevamente los principales índices europeos han conseguido mantenerse sobre sus primeros soportes de corto plazo, algo que mantiene vivo el rebote que nació en los mínimos que marcaron durante la semana de Navidad.
Hablamos de soportes como son los 11.000 del DAX 30 (DAX.XE) alemán o los 3.130 puntos del Eurostoxx 50 (SX5E.ST). Mientras se mantengan todavía no se puede descartar un nuevo tramo al alza, probablemente el último antes de que veamos una corrección, tal y como puede verse en el chart adjunto.
En este sentido, las subidas podrían seguir imponiéndose hacia resistencias que presenta el Eurostoxx 50 en los 3.210-3.263 puntos, que es la que tiene que ser superada para que podamos favorecer que los mínimos que se marcaron en la semana de Navidad han sido algo más que un rebote dentro de una tendencia bajista de orden mayor.
Situación tendencial:
La tendencia que define la principal referencia europea en el largo plazo es alcista, pero llama la atención el nuevo fracaso del Eurostoxx 50 en su versión total return (SX5T.ST) tras alcanzar su resistencia creciente de medio/largo plazo que discurría por los 7.500 puntos. Desde ahí las ventas vuelven a presionar al índice y estamos viendo durante los últimos meses una corrección bajista que, de momento, se mantiene del todo vigente y que podría llevar al DAX 30 a la base del canal que viene acotando su evolución durante los últimos años, que actualmente aparece por los 9.600-10.000 puntos. Antes del alcance de este objetivo se podría formar un rebote en este comienzo de año 2019 que lleve al Eurostoxx 50 a la zona de los 3.250-3.300 puntos.