Situación de corto plazo:
La presión vendedora se volvió a imponer con fuerza en la renta variable española en una sesión en la que el Ibex 35 (IBEX.MC) marcó un nuevo mínimo anual y decreciente dentro de la tendencia bajista que desarrolla durante los últimos meses, lo cual nos advierte de que la misma se mantiene del todo vigente. A corto plazo estamos muy pendientes de lo que sucede en el importante soporte de los 8.500 puntos ya que de su mantenimiento depende que no se abra la puerta a una probable profundización bajista hacia los mínimos del año 2016 en los 7.579 puntos.