Se cumple el primer requisito que exigíamos para fiarnos del rebote
Situación de corto plazo:
El Eurostoxx 50 (SX5E.ST) consiguió ayer superar los máximos que marcó el pasado viernes, que era el requisito que exigíamos de cara a poder dar cierta fiabilidad al nuevo intento de rebote en las bolsas europeas. El siguiente paso que haría ganar enteros a la posibilidad de asistir a un rebote sostenible más allá de un par de sesiones es que la principal referencia logre cerrar el hueco bajista que abrió a partir de los 3.150 puntos, donde se encuentra también lo que supondría una recuperación del 61,80% de toda la última caída que nació en los 3.250 puntos, que sería el objetivo que buscaría si supera esos 3.150 puntos.
La superación de primeras resistencias en Europa nos invita en esta ocasión, a diferencia de los últimos rebotes que consideramos altamente vulnerables y que calificamos como rebotes de Judas, a poner un pie en el mercado ya que no descartamos la posibilidad de que el rebote pueda ser importante, algo que ganaría muchos enteros si al otro lado del Atlántico las principales referencias estadounidenses consiguen superar resistencias análogas que también encuentran en los máximos del pasado viernes, tales como son los 2.708 del S&P500 (SP500.CH) o los 25.095 del Dow Jones Industrial (DJI.NY). En el caso del Nasdaq 100 (NDX100.NQ), más fuerte últimamente como refleja el hecho de que en la última caída no perdiera los mínimos de octubre y noviembre, su resistencia aparece en los 6.850 puntos.
Situación tendencial:
La tendencia que define la principal referencia europea en el largo plazo es alcista, pero llama la atención el nuevo fracaso del Eurostoxx 50 en su versión total return (SX5T.ST) tras alcanzar su resistencia creciente de medio/largo plazo que discurría por los 7.500 puntos. Desde ahí las ventas vuelven a presionar al índice y estamos viendo durante los últimos meses una corrección bajista que, de momento, se mantiene del todo vigente.
