Descensos generalizados en las bolsas europeas que siguen mostrándose incapaces de formar un rebote que sirva para que se aleje el riesgo de asistir a una recaída a la zona de los mínimos del año, donde se encuentran de forma general lo que hemos llamado los grandes soportes, tales como son los 11.500 del Dax 30 (DAX.XE) alemán, de cuyo mantenimiento depende que no se abra la puerta a una tendencia bajista que podría provocar caídas del 10-15% en los índices del Viejo Continente.