Que las bolsas europeas hayan optado a corto plazo por consolidar parte del último rebote es algo que nos parece del todo normal y hasta sano para seguir confiando en un contexto de reestructuración alcista que plantee alzas importantes en la recta final del año, que se confirmará en cuanto se superen resistencias que presenta el Eurostoxx 50 en los 3.540 y el Ibex 35 (IBEX.MC) en los 10.000 puntos. Hasta que no se superen esas resistencias se mantendrá la situación de vaivenes que estamos viendo durante todo el verano.