Situación de corto plazo:
Apenas cambios en las bolsas europeas en una sesión en la que los índices optaron por mantenerse en niveles de cierre del día anterior, esperando a ver la reacción del mercado ante la decisiva reunión de la Reserva Federal de EEUU. Pues bien, finalmente la reacción no fue bajista, como sucedió tras la reunión del BCE, y esto es una buena noticia de cara a que podamos seguir confiando en el rebote que se inició en los mínimos del martes.
En este sentido, la situación analítica sigue igual y las posibilidades alcistas pasan por que se mantengan en pie los mínimos que de forma general se marcaron el martes en las bolsas. Mientras esos soportes no se pierdan no se puede descartar que exista un contraataque alcista de mayor magnitud, algo que nos ha invitado a aumentar ligeramente nuestra exposición a bolsa europea, siguiendo la línea de actuación que hicimos el día anterior con la bolsa norteamericana.
Hablamos de soportes como son los 10.100 puntos en el DAX 30 alemán, los 4.480 puntos en el Nasdaq 100 o los 3.138 en el Eurostoxx 50. Si estos soportes caen mucho nos tememos que podríamos tener una recta final de año especialmente bajista para las bolsas y nos veríamos obligados a volver a reducir la exposición a bolsa.
Situación tendencial:
Los mínimos del pasado mes de agosto en los 2.970/3.000 puntos se han convertido en la línea divisoria que separa un escenario alcista de uno potencialmente bajista a medio plazo. Mientras se mantenga este soporte la tendencia alcista que define la principal referencia europea en plazos medios y largos se mantendrá intacta. Si se perdieran habría que dar por finalizada la tendencia alcista que nació en los mínimos del año 2011.