Situación de corto plazo:
Moderados ascensos en un comienzo de semana en el que las principales bolsas europeas están tratando de dar continuidad a un rebote que seguimos considerando muy vulnerable aunque por el momento se mantiene vivo y así continuará mientras el Eurostoxx 50 (SX5E.ST) no pierda soportes de 2.670 y sobre todo los 2.595 puntos.
Mientras no se pierdan estos soportes todavía no podemos descartar la posibilidad de que se acaben alcanzando resistencias como son los 2.900 puntos del Eurostoxx 50 y los 10.380 puntos del DAX 30 (DAX.XE) alemán, cuyo alcance supondría una recuperación del 38,20% de Fibonacci de toda la última caída. Para hablar de fortaleza del rebote es preciso que sea capaz de superar estos primeros puntos de giro potenciales y resistencias teóricas, desde donde no nos sorprendería ver otro hachazo bajista que lleve a los índices europeos a los mínimos que marcaron hace dos semanas y que son el origen de este rebote.
Situación tendencial:
La tendencia alcista que definía desde el año 2009 el EuroStoxx 50 Total Return (SX5T.ST), que es la versión mejorada del índice tradicional EuroStoxx 50 que contempla la reinversión de los dividendos que reparten periódicamente las empresas que forman parte del índice, se ha cancelado tras asistir a la pérdida de los 6.000 puntos, que eran los mínimos de diciembre de 2018. Es momento de ir aprovechando rebotes para obtener una liquidez que será muy necesaria y preciada para cuando detectemos un suelo y podamos recomponer la cartera con una visión de largo plazo.
Un rebote en las bolsas europeas no nos sorprende ya que se está formando tras alcanzarse entornos de soporte histórico en muchos índices, como los 8.150-8.200 puntos del DAX 30 alemán (mínimos en 8.250), donde se encuentra una antigua resistencia de muy largo plazo como son los son los máximos de la burbuja tecnológica del año 2000 y de la crisis financiera del año 2007-2008. Todo apunta a que este soporte será partido en dos en un próximo hachazo bajista ya que seguimos considerando que es muy difícil que hayamos visto un suelo más allá de algo temporal.
Si atendemos a la estructura de precios que vemos en los índices del Viejo Continente mucho nos tememos que aún no hemos visto lo peor. Por poner un ejemplo, el DAX 30 alemán todavía no ha alcanzado ni siquiera el objetivo de caída mínimo del patrón bajista en forma de doble techo que confirmó tras perder los 10.250 puntos y que aparece en los 7.700 puntos del índice germano.