Situación de corto plazo:
La fuerte caída que vimos ayer en Wall Street llevó al S&P 500 (SP500.CH) a aproximarse a la zona de mínimos que marcó el año 2018 en los 2.350 puntos, que es el objetivo mínimo de caída que señalábamos que podía verse tras perder el índice el soporte de los 2.700-2.730 puntos. El alcance de este soporte teórico, que además coincide con un retroceso del 38,20% de Fibonacci de toda la tendencia alcista de largo plazo anterior, que nació en los mínimos de 2009, es probable que provoque un freno temporal en las caídas y un potente rebote.