Situación de corto plazo:
Con la del viernes ya son ocho las jornadas en las que el Eurostoxx 50 (SX5E.ST) cerró pegado a la importante resistencia que presenta en la zona de los 3.630 puntos, que son los máximos que han frenado las subidas durante las dos últimas semanas y cuya ruptura cada vez parece más cercana y permitiría dar por concluida la fase de consolidación que desarrolla la principal referencia europea desde el año 2015 y habilitaría la probable reanudación de la tendencia alcista que se inició en los mínimos del año 2009. Esto último se confirmaría definitivamente si al otro lado del Atlántico el S&P 500 rompe resistencias análogas que presenta en los 3.060 puntos, lo cual situaría al mercado norteamericano en subida libre absoluta, tras dejar atrás la fase de consolidación que nació a comienzos de 2018.