Ecoaula
La igualdad de género: cada vez más lejos de ser una realidad, también en educación
- La brecha global de género tardará cien años en cerrarse.
Carmen García
El nivel de salud, la participación en la economía o el acceso a la educación todavía marcan diferencias entre hombres y mujeres. La desigualdad entre ambos géneros se manifiesta diariamente en múltiples ámbitos, sin embargo, es en el ámbito laboral donde estas desigualdades son más evidentes. Según el informe Global Gan Gender de 2017, el buen avance que se estaba llevando a cabo ha sufrido un retroceso. Este estudio que realiza desde el año 2006 el Foro Económico mundial valora hasta cuatro aspectos en 144 países: educación, salud, economía y política.
A pesar de que Europa es la región que mejor resultado obtiene es en la que más se estancan los resultados. En concreto, España ha pasado del puesto vigésimo noveno que ocupaba en el 2016 al vigésimo cuarto de este año, sin embargo, se ha descendido en el área relacionada con los puestos laborales. En lo que respecta a la educación, la tasa de alfabetización ha mejorado en nueve puntos, pero en logros educativos se ha dado un paso atrás.
Acabar con la violencia de género es una de las prioridades de los Gobiernos, ONGs y asociaciones. La mayor parte de los países han creado leyes específicas para ponerle fin, sin embargo todavía existen vacíos legales respecto a la protección. De esta forma, el año 2017 ha finalizado con 55 mujeres asesinadas y 5 hijos e hijas de éstas.
Según el último estudio de la OCDE, los países de la OCDE identificaron las tres cuestiones más importantes de desigualdad de género: violencia contra las mujeres, la disparidad salarial entre los géneros y la distribución desigual del trabajo no remunerado. Mientras que hoy en día las mujeres jóvenes abandonan los estudios superiores con mejores calificaciones que los hombres, son estos los que obtienen un trabajo con ese nivel de titulación mucho antes que ellas. Además, las mujeres tienen menos probabilidades de avanzar en puestos directivos, son más propensas a enfrentarse a la discriminación y ganan menos que los hombres. Según los datos de la OCDE, ganan hasta un 15% menos.
Un 55% de las mujeres de la UE han experimentado acoso sexual
El Instituto Europeo de Igualdad de Género (EIGE) incide en que la tasa de empleo en la UE aumentaría significativamente si las mujeres disfrutasen de un mayor grado de igualdad en la oferta educativa y el mercado laboral. Según sus datos, esto incrementaría la contratación entre 0,5 y 0,8 puntos porcentuales en 2030 y de entre 2,1 y 3,5 en 2050. Esto aumentaría hasta un 80% el empleo.
En lo que se refiere al ámbito de la empresa, el informe de gobierno corporativo de las empresas cotizadas en 2016 publicado por la CNMV apunta que solo un 16,6% de los puestos son de mujeres, la mayoría elegidas como vocales, sin ninguna oportunidad de ascender a puestos más relevantes. Con el objetivo de que esta situación mejore, se recomienda que se favorezca la diversidad, sin embargo, eso está muy lejos de suceder. Otro aspecto del mundo laboral en el que la desigualdad está plenamente visible son las diferencias salariales. Según el INE, el número de mujeres que ganan menos de 1.000 euros es el doble que el de hombres.
Tras todos estos datos, un informe del Foro Económico Mundial advierte de que el progreso para lograr la igualdad está estancado y se tardará hasta un siglo en terminar con la brecha de género global. Se ha decretado que en los entornos laborales y en la economía es donde se ha visto una mayor caída.
La educación no se queda atrás. Según el informe "Panorama de la Educación 2017" elaborado también por la OCDE, en las carreras de ingeniería, producción industrial y construcción solo una de cada cuatro estudiantes son mujeres. Todo lo contrario se observa en las carreras relacionadas con el sector educativo, donde obtienen un 79% y las relacionadas con la salud y el bienestar, el 72%. La segregación en educación en muchas ocasiones comienza en los colegios. Para avanzar hacia la inclusión y la equidad en este ámbito, la Estrategia Europa 2020 tiene entre sus objetivos un porcentaje de abandono escolar inferior al 10% y un mínimo del 40% de las personas entre 30 y 34 años con estudios superiores finalizados. Para ayudar a cumplir estos objetivos, los gobiernos de los países miembros han establecido objetivos nacionales que contribuyan a lograr los generales de la UE. Para ello, la Oficina Estadística de la UE publica periódicamente informes sobre cómo avanza la situación.
Los países deben prestar atención a la brecha de género mediante políticas concretas que ayuden a establecer la igualdad de género en todas las áreas posibles incidiendo en las que están en una situación crítica.