Ecoaula
¿Cómo se realizará la desescalada en el mundo educativo?
- Al arrancar la fase 1 los centros escolares deberán abrir sus puertas
Carmen García
Madrid,
No habrá vuelta a las aulas hasta septiembre, pero el curso no termina. El presidente del Gobierno indicó ayer todos los detalles de la desescalada en cuatro fases, recordando que el curso escolar terminará, como es habitual, en el mes de junio. A pesar de que a lo largo de las próximas semanas se irán viendo pequeños avances que buscan una nueva normalidad, los estudiantes tendrán que seguir con la educación a distancia hasta que finalice la actividad lectiva.
Se trata de una situación con una dificultad adicional. La desescalada puede suponer para muchos el inicio o la recuperación de lo que un día fue, pero sin tomar las medidas adecuadas puede resultar fatal para la evolución sanitaria y económica del país. Pedro Sánchez explicó ayer que antes de septiembre se podrán producir algunos cambios significativos en la educación. En este sentido, al arrancar la fase 1 los centros escolares deberán abrir sus puertas, cerradas desde el 16 de marzo, para desinfecciones y trámites administrativos.
En plena desescalada, cuando una provincia pueda alcanzar la fase 2, es decir, entre finales de mayo y principios de junio, se reabrirán centros educativos con tres fines fundamentales. En primer lugar, para llevar a cabo actividades de refuerzo, garantizar que los niños menores de seis años puedan acudir a estas aulas en el caso de que sus padres tengan que trabajar ya de forma presencial y, por último, celebrar la EvAU.
Aumentan las discrepancias
No obstante, ya empiezan a surgir críticas en torno a esta medida. La secretaria general de la Federación de Enseñanza de Madrid, Isabel Galvín, considera que se trata de una "contradicción" dar por concluida la actividad educativa presencial para el curso escolar 2019-2020. Además, desde CCOO lamentan que el plan de retorno y apertura de los centros educativos no se haya negociado con los expertos de la materia, que son el profesorado y los representantes del sector educativo.
Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado este miércoles que el plan de desescalada presentado por el Gobierno "no ofrece certezas sobre la evolución del coronavirus", por lo que hay que prepararse para "una posible oleada de nuevos contagios".
El sindicado exige equipos de protección para todos los trabajadores, tanto en sus puestos de trabajo como en los desplazamientos, así como la realización de test masivos a todo el personal, incluidos los asintomáticos y una desinfección regular de los centros de trabajo.
En esta misma línea se situó la confederación de STEs-i, que criticó que se pueda retomar la actividad presencial en los centros educativos y admitió estar esperando una explicación de la ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá. En una nota, la confederación rechazó las medidas que se están anunciando para la desescalada del estado de alarma en el ámbito escolar. "Organizativamente vemos imposible conjugar, con las actuales plantillas docentes, seguir atendiendo mediante el teletrabajo a la mayoría del alumnado y, a la vez, acudir a los centros educativos para atender presencialmente al resto en los niveles y etapas que ha fijado el Gobierno", protestó STEs-i.
ANPE critica la "confusión" e "inconcreción" del Gobierno con respecto a la reapertura de clases en mayo y junio, exigiendo que se aclare en qué cursos pueden volver y qué alumnos.
Exigen más medidas de seguridad
La responsable de Educación de UGT, Maribel Loranca, ha remarcado su confianza en las medidas impuestas por el Gobierno, indicando que le parece razonable que se reanude la actividad lectiva presencial para septiembre. No obstante, desde UGT reclaman al Gobierno que concrete más con respecto a las excepciones contempladas de regreso a las aulas en mayo y junio.
Algunas de estas medidas son la desinfección de aulas e instalaciones, la realización de pruebas PCR a los trabajadores y proporcionarles equipos de protección individual (EPI), establecer protocolos de actuación con medidas concretas sobre distanciamiento físico, etc.
La Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes (CANAE) ha aplaudido que los centros puedan abrir en verano, siempre y cuando las condiciones de seguridad lo permitan. La presidenta de CANAE, Andrea Henry, explica que la vuelta en septiembre de forma presencial es una buena noticia pero que "hay que rebajar los ratios y que todos los institutos posean las mismas medidas sanitarias".
Quiénes volverán a clase
Los alumnos de educación especial que quieran acudir a clase lo podrán hacer con cierta normalidad a partir de la fase dos. Durante las semanas que dure este periodo, los colegios estarán abiertos para refuerzos voluntarios o recomendados por el profesor, especialmente dirigidos a alumnos que terminen el ciclo, es decir, para alumnos de 4º de ESO, 2º de Bachillerato, 2º de FP de Grado Medio y Superior y último año de Enseñanzas de régimen especial. Sin embargo, los centros también prepararán programas de refuerzo educativo a desarrollar para los alumnos que no se mencionan en las líneas anteriores.