Ecoaula
Medicina, Ingenierías y Matemáticas-Física, los grados que más seducen
- La titulación universitaria más demandada es ADE
Víctor Barahona
La decisión ya está tomada. El comienzo del nuevo curso universitario 2019-2020 ha puesto fin a las reflexiones de miles de estudiantes que, antes del verano, se preguntaban cuál podría ser la mejor opción formativa para dedicarle su tiempo en los próximos años y, en última instancia, poder vivir con comodidad en su futuro. Factores relacionados con asuntos menos pragmáticos como el gusto personal o la vocación se enfrentaban en la balanza de la decisión a otros aspectos que tienen más que ver con las necesidades del mercado.
Sin embargo, ante un entorno laboral tan cambiante, donde siguen surgiendo nuevas profesiones y nuevos campos de trabajo, es muy difícil que los alumnos que este año ingresan en las numerosas facultades de nuestra geografía puedan tener la certeza de cuál será, dentro de un lustro, la profesión a la que se tendrán que enfrentar.
Hace aproximadamente seis meses, ManpowerGroup y la Fundación Innovación España (Fundación I+E) presentaban en el marco de la jornada Los jóvenes y el empleo, ¿qué futuro les espera? un informe que analiza el futuro del empleo en España hasta el año 2028. De dicho informe se extraen conclusiones como que, en la próxima década, el empleo dirigido a jóvenes menores de 35 años podrá crecer entre el 2,3 y el 3,5 por ciento, llegando a crearse entre 200.000 y 250.000 empleos de alta cualificación. Sin embargo, entre un 42 y un 49 por ciento de estas posiciones podrían quedarse sin cubrir (de 85.000 a 105.000 vacantes), no sólo por el desajuste demográfico, sino también porque la nueva oferta de candidatos con la formación adecuada se prevé insuficiente para atender la creación de empleos de alta cualificación que deberían ser ocupados por jóvenes.
Esta transformación tiene particular importancia dado el cambio tecnológico en curso y, por ello, en su impacto en la capacidad de la oferta de trabajo joven de atender los requerimientos de cualificación tecnológica que las empresas demandarán la próxima década.
En esta línea, el presidente de Ericsson España y vicepresidente de Fundación I+E, José Antonio López, afirma que "tenemos que actuar ya para construir un modelo que estimule las vocaciones técnicas y tecnológicas, potencie habilidades para la empleabilidad y contemple la formación como un proceso de aprendizaje a lo largo de toda la vida", tal y como expresó en la presentación del informe mencionado.
¿Qué eligen los alumnos?
Desde hace cinco cursos, el doble grado de Físicas y Matemáticas se convierte en uno de los más demandado por los estudiantes más sobresalientes en la Evaluación para el Acceso a la Universidad. Es por eso que estos estudios –impartidos en diferentes universidades de nuestro país, como la Universidad Complutense de Madrid, la Autónoma de Barcelona, la Universidad de Santiago de Compostela o las andaluzas de Sevilla y Granada– se posicionan a la cabeza de las distintas notas de corte, superando desde hace años los 13 puntos (sobre 14).
Como explica el Decano de la Facultad de Ciencias Físicas de la Universidad Complutense de Madrid, Angel Gómez Nicola, "en el Doble Grado Matemáticas-Física ofrecemos una formación combinada en ambas disciplinas que resulta muy atractiva para estudiantes con vocación científica, espíritu crítico y un interés por entender las leyes Físicas de la naturaleza sin renunciar al estudio de las Matemáticas como ciencia en si misma. Este tipo de perfil se asocia a estudiantes con notas altas en bachillerato. La demanda de hecho se ha ido incrementando a lo largo de los años, lo que a su vez ha ido potenciando considerablemente la visibilidad y prestigio de esta titulación".
Las posibilidades laborales de los egresados de esta carrera son notables, pues –en palabras de Gómez Nicola– "la formación de nuestros estudiantes fomenta el espíritu crítico y la constante búsqueda de las fronteras del conocimiento, forjando mentes versátiles y capaces de adaptarse a su vez a cualquier problema y desafío profesional".
Es por es que "nuestros titulados se encuentran entre los más demandados en muchos campos del mercado laboral como son aquellos relacionados con el desarrollo tecnológico e industrial, la docencia, consultoría, análisis de datos, nuevas tecnologías, etc." Además, en el futuro, tal y como añade Gómez Nicola, "resultarán idóneos para integrarse en entornos laborales de nueva creación como puedan ser los de machine learning, tecnologías cuánticas o big data, así como para contribuir a la innovación en cualquier campo".
Quizás por esto, en la Complutense, la nota de corte de dicho doble grado se ha situado este curso en 13,775 puntos –la más alta de la oferta estudiantil–, aunque la carrera que más solicitudes ha recibido en la Comunidad madrileña ha sido, un año más, Medicina, también en la Universidad Complutense, con alrededor de 2.300 solicitudes de nuevos alumnos. Su nota de corte también se sitúa entre las más altas, concretamente con un 13,044.
Precisamente, en el último Informe Infoempleo Adecco –que analiza la oferta y demanda de empleo en el año 2018– se recogía que las carreras del área sanitaria, Enfermería, Medicina y Biomedicina, son las que han experimentado un aumento más notable de su empleabilidad, ganando entre 0,7 y 0,5 puntos porcentuales.
También de un reciente informe publicado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades –que se analizan los datos de inserción laboral de los egresados universitarios del curso 2013-2014 durante los cuatro años siguientes al fin de sus estudios– se extrae que Medicina es la carrera con mayor empleabilidad. Y es que el 91 por ciento de sus 5.571 graduados en 2014 estaba afiliado en 2018 a la Seguridad Social. Cabe decir también que, según se señala en este informe, los egresados de Medicina son los que tienen una base de cotización mayor: 34.290 euros anuales.
El resto de carreras universitarias con mayor empleabilidad son Óptica y optometría (90,2%), Podología (88,9%), Ingeniería eléctrica (85%), Informática (84,6%), Logopedia (84,5%), Ingeniería mecánica (84,1%), Farmacia (84,1%), Ingeniería electrónica industrial y automática (83,8%) e Ingeniería agraria y agroalimentaria (83,7%).
Pública o privada
Según los datos que publica el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades en su informe Inserción laboral de los egresados universitarios, también existen diferencias entre los profesionales que finalizaron sus estudios en centros públicos y los que optaron por alguna de las muchas universidades privadas de nuestro país.
Así, en el primer año de terminar la carrera el porcentaje de estudiantes afiliados a la Seguridad Social era mayor entre los que salían de centros privados, un 56,1 por ciento, frente al 42,7 por ciento de los egresados de la universidad pública. No obstante, una de las causas que provoca esta diferencia, según la estadística del Ministerio, es que existen titulaciones con una baja tasa de afiliación a la Seguridad Social –especialmente el primer año– que, en su gran mayoría, sólo se imparten en universidades de titularidad pública.
En general, también el porcentaje de contratos indefinidos en estudiantes de universidades privadas es mayor que el de las públicas. Así como las retribuciones medias, mayores entre los egresados de centros privados.
ADE, la más demandada
Atendiendo de nuevo al informe elaborado por Infoempleo y Adecco, sobre la oferta y demanda de empleo en 2018, se extrae que la titulación universitaria más demandada en la oferta de empleo vuelve a ser la de Administración y Dirección de Empresas (ADE). Como explican desde Infoempleo, en el año pasado, casi una de cada diez ofertas de empleo pedían candidatos titulados en ADE, en concreto el 9 por ciento.
La Coordinadora del grado de Administración y Dirección de Empresas de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Rey Juan Carlos, Sonia Medina Salgado, afirma que "un grado como el de ADE tiene un amplio abanico de posibilidades desde el ámbito privado al público y tanto en organizaciones productivas como de servicios. Ya sea centrado en la gestión de procesos organizativos, la dirección de empresas o la asesoría entre otros".
Cabe decir que la nota de corte para los estudios de ADE no se sitúa entre las más altas; siendo, en muchas universidades de nuestra geografía, un cinco. Y es que, tal y como explica Medina Salgado, "las distintas universidades públicas y privadas, tanto en la Comunidad de Madrid como en el resto de España, ofrecen plazas en este tipo de grados y en otros similares. También se ofertan otros que antes eran especialidades de la rama de empresariales tales como Grado en Marketing o en Contabilidad y Finanzas que son más específicos y también muy demandados en el mercado laboral.
Todo esto supone una oferta de plazas muy importante que permite que muchos alumnos puedan optar a estos estudios y que la nota de corte no sea tan elevada como en otras titulaciones con una oferta muy inferior".
ADE, en Madrid, en la Universidad Complutense, tiene una nota de corte de 10,048 si se cursa su plan de estudios en inglés. También se supera el 10 en la Universidad Autónoma.
En la de Alcalá supera los 8 puntos y en la Rey Juan Carlos ronda los 7. En Cataluña, la nota de corte de esta carrera es de 10,922 en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona y en la Universidad Autónoma, también de la Ciudad Condal, supera el 9. Esta carrera ofrece un importante valor añadido al impartirse conjuntamente con otras muchas titulaciones, ya sea Derecho, Marketing, Ingeniería Informática o Turismo.
En el podio de los grados que más se solicitan en las ofertas de empleo volvemos a encontrar, según el informe de Infoempleo y Adecco, las Ingenierías Informática e Industrial, en segunda y tercera posición respectivamente. Aunque también es cierto que su empleabilidad baja algunas décimas al comparar el año 2017 y 2018.
Las notas de corte de las diferentes Ingenierías siempre están entre las más altas; siendo por ejemplo este curso la carrera de Ingeniería Física en la Universitat Politècnica de Catalunya la quinta nota de corte más alta de la Comunidad, un 12,77.
Por su parte, la nota de corte de la Ingeniería Aeroespacial que se imparte en la Universitat Politèncica de València (UPV) también ocupa un quinto lugar en esta Comunidad, con un 12,692 sobre 14. En la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), la doble titulación Física-Ingeniería Electrónica se alza con la nota de corte más alta de todas.
La cara B de la formación
Mientras que el 91 por ciento de los estudiantes que terminaron Medicina en el curso 2013-2014 estaban afiliados a la Seguridad Social en 2018, solo un 50,5 por ciento de los egresados de la carrera de Bellas Artes conseguía esa afiliación. Estos datos los refleja el informe Inserción laboral de los egresados universitarios, dando cuenta de que, por desgracia, la formación universitaria no siempre es sinómino de éxito profesional.
Después de la carrera de Bellas Artes, los campos con menor empleabilidad según el mismo informe del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades son los siguientes: Otras lenguas extranjeras (50,8%), Lenguas modernas y aplicadas (54,2%), Historia del Arte (55,2%), Historia (55,6%), Derecho (55,8%), Filosofía (56,1%), Traducción e Interpretación (56,5%), Humanidades (58,3%) y Criminología (59,1%).
También de dicho informe se extrae que las retribuciones medias de los hombres son más altas. Mientras que la retribución global de las mujeres al cuarto año de egresar es de 25.044 euros, la de los hombres es de 27.668 euros.