Deporte y Negocio

El futuro del fútbol chino se cuece en Madrid: el proyecto de Evergrande

  • Una escuela en el norte de Madrid pule a las futuras joyas del fútbol chino
  • Todo comenzó en Cantón en 2011 y creció en la capital española en 2014
Foto: Evergrande.

Sergio de la Cruz

China anda inmersa en un proceso de crecimiento de su fútbol, deporte que está recibiendo un empujón gubernamental claro que busca convertir al balompié chino en una de las potencias asiáticas. Una tarea que ha movilizado al aparato político, educativo y deportivo de uno de los países más poderosos del mundo y que tiene en España, en Madrid, una apuesta clave en la que mucho tienen que ver el Real Madrid y Evergrande.

En el norte de la capital española se desarrolla un proyecto impulsado por la empresa china y avalado y supervisado por la metodología del equipo blanco. Se trata de un escuela que replica en cierta parte la estructura que Evergrande posee en Cantón, en la que hay unas 2.800 promesas del fútbol chino fruto de un trabajo de 'reclutamiento' que repartió a 2.000 ojeadores por todo el país para buscar a los mejores jugadores jóvenes. El complejo, casi faraónico, fue reconocido por Guiness como la escuela futbolística más grande del mundo y cuenta con 50 campos de fútbol.

El funcionamiento comenzó siendo el siguiente: el Real Madrid dispuso a una treintena de entrenadores en el país asiático, donde implantaron su método de trabajo. Allí, los jugadores siguen un modelo combinado de fútbol y educación. Los niños reciben formación deportiva y prosiguen con su enseñanza.

Así funcionó desde que 2011 Evergrande comenzase una inversión que ya está tasada en 250 millones de euros. Evergrande recibía una ayuda y asesoramiento esencial para un proyecto ambicioso que partía de cero; el Real Madrid, que lleva varios años buscando métodos diferentes al del gran gasto en galácticos, se colocaba en la 'pole' en el mercado asiático de jóvenes promesas.

Esas fueron las raíces, que empezaron a germinar a miles de kilómetros, en Madrid. En 2014, Evergrande, en base a su alianza con el Real Madrid, estableció una nueva escuela. La intención, clara: dar un paso más en el adiestramiento de los jugadores. Así, los proyectos de futbolistas con un talento potencial que llegasen a la edad de 13 a 17 años se formarían directamente en la capital española, recibiendo todas las enseñanzas deportivas (en paralelo a las educativas) con el sello del club blanco. Una 'mili' previa para que, de nuevo de vuelta en China, comenzasen a escribir los primeros capítulos de la historia de una nueva generación de futbolistas nacionales.

Así ha sido durante los últimos cinco años. Hace tan solo un mes, la escuela consiguió un paso vital: ofrecer a sus joyas la posibilidad de foguearse ante equipos españoles, opción complicada (no podían inscribirse en competiciones españolas) que se saldaba con la construcción de torneos alternativos y no siempre con una periodicidad estable.

La solución ha venido de la mano del apoyo de la Federación Española de Fútbol (RFEF) y la Federación Madrileña (RFMF). Bautizada con el nombre de Evergrande Championship Cup, esta nueva competición permitirá a los jugadores de la escuela batirse contra los filiales de Real Madrid, Getafe, Rayo Vallecano o Getafe aportando un plus a la formación en España, sacando de un letargo competitivo a los que deben ser pilares del crecimiento del fútbol chino. La producción de talentos ha empezado a dar resultados: 47 ya han jugado en las categorías inferiores de la selección china y 83 han llegado al Evergrande Guangzhou.

En la actualidad, son 100 los futbolistas que viven en España. Reciben formación de profesores chinos, los métodos de desarrollo futbolístico del Real Madrid y, en definitiva, la preparación necesaria para tratar de convertirse en las joyas que China reclama para, quién sabe, llegar a un Mundial (¿al de Qatar 2022, quizá?) más pronto que tarde y avanzar en una cruzada futbolística en la que todo un país está implicado.