Cataluña

Torra prevé agotar la legislatura para continuar el 'procés' sin ilegalidades

  • Persiste en el objetivo de restituir a Carles Puigdemont como 'president'
  • El pleno del Parlament decidirá sobre la suspensión de diputados procesados
  • Antes del 15 de octubre se pondrá en marcha el foro civil constituyente
Joaquim Torra presentando su plan de gobierno. Foto: Luis Moreno

Estela López
Barcelona,

El presidente de la Generalitat, Joaquim Torra, presentó ayer el plan de Gobierno de esta legislatura con el objetivo de agotar los cuatro años de mandato para seguir adelante con el procés hacia la República catalana, si bien ninguna de las medidas enunciadas supone traspasar el límite de la legalidad vigente.

Con todo, Torra recordó en rueda de prensa que la restitución de Carles Puigdemont como peresidente de la Generalitat "es pieza clave esta legislatura", y que "la" solución política que debe ofrecer Pedro Sánchez a Cataluña es la celebración de un referéndum de autodeterminación.

El plan de Gobierno incluye 22 ámbitos de actuación, 93 objetivos, más de 1.000 medidas y más de 300 indicadores de seguimiento, pero más allá de la hoja de ruta independentista, nada nuevo. Todas las medidas destacadas por Torra forman parte de los planes ya dibujados por los gobiernos catalanes anteriores.

En el ámbito económico, la meta es "la soberanía económica". En esta línea, persiste el objetivo de poder prescindir del FLA para volver a buscar financiación en los mercados internacionales -sin fecha marcada-, así como el fortalecimiento de la Hacienda catalana.

Torra siguió la línea argumental de su discurso de investidura y de su conferencia de inicio de curso político de principios de este mes, e insistió en que recuperarán el contenido de las leyes sociales suspendidas por el Tribunal Constitucional y seguirán reabriendo las delegaciones internacionales de la Generalitat e internacionalizando el procés.

En Cataluña, la primera acción prevista es poner en marcha antes del 15 de octubre el Foro social, cívico y constituyente, impulsado por el Govern a través de la Conselleria de Presidencia- para que los ciudadanos debatan "las bases para la Constitución de Cataluña", con un consejo gestor "amplio, plural y diverso".

También afirmó que el 1-O no debe ser una jornada de nostalgia sino "reivindicativa de un día de victoria en el que los catalanes se enfrentaron pacíficamente y democráticamente al Estado para ejercer su derecho de autodeterminación". Asimismo, confió en poder aprobar los presupuestos de la Generalitat para 2019 negociando con la CUP y Catalunya en Comú-Podem.

También ayer, tras semanas de negociaciones infructuosas entre JxCAT y ERC, la Mesa del Parlament decidió apelar al reglamento para que sea el pleno el que vote si los diputados procesados por el Tribunal Supremo -entre los que se incluye Puigdemont- deben ser suspendidos, como determinó en julio el juez Pablo Llarena.