Cataluña

Del 'terremoto' por el referéndum a la paz tensa de los estibadores

  • Más de 300 empresarios exigen en Tarragona el impulso del Corredor
  • Pastas Gallo pone a la venta el 40% de la firma por una disputa familiar
Oriol Junqueras en el Parlament | Luis Moreno

elEconomista.es

Semana complicada y con muchos frentes abiertos. Si el lunes más de 300 empresarios exigían la puesta en marcha del Corredor Mediterráneo, los estibadores empezaban a movilizarse en el Puerto de Barcelona y elEconomista adelantaba la guerra familiar en Pastas Gallo.

Las empresas familiares temen la llegada de la tercera generación por los problemas que se pueden derivar en cuestión de disputas familiares, pero para la catalana Pastas Gallo no ha hecho falta llegar tan lejos. Los hijos del fundador han roto a nivel empresarial y ya se está buscando comprador al 40% de la compañía. Para ello, dos de las propietarias buscan posibles interesados ofreciendo este paquete accionarial por una cantidad cercana a los 120 millones de euros, tal y como ha podido saber elEconomista de fuentes del mercado. Tras más de siete décadas siendo íntegramente familiar, dos de los cinco hermanos de los Espona Massana han tomado esta decisión aprovechando la recuperación económica de la compañía y la mejora del consumo.

Ese mismo día, en Tarragona, el presidente y vicepresidente de los empresarios valencianos, Vicente Boluda y Juan Roig, hicieron lo que muy pocos han conseguido: atraer a la crème de la crème del empresariado catalán hasta Tarragona. Al lema"Queremos Corredor", más de 300 empresarios se reunieron para exigir la celeridad de las obras al Gobierno de Mariano Rajoy. Se sumaron el presidente de Colonial, Juan José Brugera, o el presidente de la patronal de grandes empresas, Foment del Treball, Joaquim Gay de Montellà. También estuvieron los responsables de firmas como Borges o Ferrero y directivos de Seat, BASF, Idilia Foods, Celsa e interproveedores de Mercadona.

Y mientras los representantes del Puerto de Barcelona o Tarragona demandaban el Corredor, en sus respectivas infraestructuras los estibadores iniciaban sus acciones. Aunque finalmente se desconvocó la huelga prevista los días 20, 22 y 24 de febrero, las negociaciones con Fomento siguen, y se vive un momento de paz tensa. Y es que algunos empresarios catalanes reconocen que a pesar de la desconvocatoria, mantienen sus planes de derivar exportaciones a través de otros puntos. El director de Logística de Pimec, Ignasi Sayol, reconocía que los puertos más próximos serían Marsella o Genova, "aunque cada empresa decidirá donde tiene mejor operatividad".

Pero donde ha habido un verdadero terremoto fue en el Parlament. Por una parte, la comparecencia de Oriol Junqueras en la comisión de Asuntos Institucionales para salir del paso por el Caso Vidal, que no resolvió las preguntas de la oposición. El 'conseller' niega que la Generalitat tenga datos fiscales de los catalanes de manera ilegal, pero reitera que está preparada para la desconexión y no especifica porqué nadie evitó sus conferencias.

En la propia cámara también recibieron la resolución del referéndum que pretende hacerse de forma legal o unilateral la anulación por parte del Tribunal Constitucional. Tras esta anulación, el tribunal notificará su decisión a numerosos cargos públicos; entre ellos al presidente catalán, Carles Puigdemont, y a todos los consellers. También entregará personalmente el auto a la presidenta del Parlamento, Carme Forcadell, y a todos los presidentes de la mesa. Estas notificaciones, que ya se produjeron en diciembre cuando el Constitucional aceptó a trámite el incidente de ejecución presentado por el Gobierno, complican que los miembros del Ejecutivo de la Generalitat puedan argumentar, si se produjera un juicio futuro, que desconocían que estaban desobedeciendo al Tribunal.