Cataluña

Los centros comerciales denuncian su discriminación en el proceso de desescalada en Cataluña

  • El sector defiende que el 85% de sus establecimientos no superan los 300 metros cuadrados
  • Advierten de que perderán más de la mitad de las ventas de la campaña de Navidad
  • Exigen la reapertura inmediata con concentraciones en algunos centros
Concentración de protesta de los comerciantes en el centro Illa Diagonal, en Barcelona. EE

María Teresa Coca
Barcelona,

Los centros comerciales han denunciado que el proceso de desescalada aprobado por la Generalitat de Cataluña les discrimina ante el comercio en general y otras actividades al retrasar su apertura hasta el próximo 7 de diciembre, con limitación del 30% del aforo.

El sector advierte de que en aquella fecha sus establecimientos llevarán acumulados cierres equivalentes a a más de un tercio del conjunto del año y se habrán perdido las dos primeras semanas desde la apertura del periodo de las compras navideñas que tiene su punto de partida en la campaña del Black Friday, a finales de noviembre. Además, debido a la festividad del 8 de diciembre -en la que este año no está prevista la apertura del comercio como sí sucederá el domingo 6 de diciembre-, los centros comerciales también perderán las ventas del puente de la Constitución, puesto que la apertura efectiva se trasladará al 9 de diciembre en la mayoría de los establecimientos, a solo dos semanas de la celebración de la Navidad.

Víctor García, representante en Cataluña de la Asociación Española de Centros y Parques Comerciales, constata que de finales de noviembre a enero, los comercios facturan un 30% de su negocio anual y que con la desescalada aprobada por la Generalitat, los centros comerciales únicamente tendrán un aforo del 50% desde el 21 de diciembre. Ello teniendo en cuenta que los propietarios de centros y parques comerciales han invertido más de 30 millones de euros en medidas higiénico-sanitarias y de seguridad para la reapertura en mayo y junio, que se suman a los 600 millones de euros que han invertido en EPIs las marcas que están presentes en centros comerciales.

García se pregunta qué diferencia hay para permitir la apertura entre un comercio urbano y un establecimiento en un centro comercial al aire libre o también entre éste y una tienda de más de 15.000 metros cuadrados.

La patronal del sector recuerda que en Cataluña hay 3.700 locales en centros comerciales, de los que más de 3.000 han cerrado sus puertas debido a las restricciones, y de éstos el 85% son pequeño comercio, de menos de 300 metros cuadrados. Estas tiendas emplean a más de más de 70.000 trabajadores entre directos e indirectos, repartidos en un total de 49 centros comerciales en Cataluña.

Además, el sector considera que las medidas anunciadas generan una gran inseguridad a los ciudadanos que optarán por realizar sus compras a través de internet, hecho que afectará negativamente al comercio local, generando un agravio comparativo con los grandes players del e-commerce, así como una discriminación con los negocios ubicados en estos centros comerciales frente a los que están a pie de calle. "Es obvio que habrá consumidores que si no pueden acceder a su centro de referencia para las compras optarán por el comercio online", evidencia Víctor García, que concreta que el comercio en general ha hecho un gran esfuerzo por la digitalización y es una de las tendencias de venta, pero advierte de que "aunque sea necesario disponer del comercio online, nunca podrá sustituir una campaña de Navidad con compras en la tienda física".

Con los establecimientos a medio gas, muchas de las enseñas y comercios dejarán de reforzar -como viene siendo habitual en estas fechas- su plantilla porque no tendrán capacidad financiera suficiente, además de que sin un óptimo nivel de las ventas de las próximas semanas "muchos se verán abocados a aplicar despidos a partir de enero de 2021", asegura Víctor García. A pesar de que han acudido a los préstamos ICO y a los ERTE cuando ha sido necesario, comenta.

Un efecto que se sumará a los despidos que ya han aplicado los establecimientos que no han podido sostener los cierres anteriores, como muestra la caída del nivel de ocupación en los centros comerciales, según datos de la patronal.

Protestas para la reapertura

El sector ha contado con el apoyo de las asociaciones de comerciantes que destacan que las últimas medidas de restricción aplicadas por la Generalitat en las últimas semanas han provocado la caída de las ventas de casi un 20%.

En un acción conjunta, la tarde noche de este viernes se han concentrado en el centro comercial Illa Diagonal, en Barcelona, para denunciar su indignación y que están en una situación dramática y que en el resto de España, menos la comunidad de Castilla-León y Cataluña, los centros comerciales pueden estar abiertos. También aseguraron que mientras tienen que estar con la persiana bajada, los gastos del 50% del alquiler o de los servicios básicos tienen que abonarse, además de tener en estoc todas las mercancías que se adquirieron con vistas al inicio de la temporada prenavideña.

El sector también ha destacado que han encontrado mejor disposición en las direcciones de los centros comerciales que con el gobierno para negociar y encontrar situaciones de consenso.