Castilla y León

El expresidente de Caja Segovia dice que todos los consejeros vieron legales las prejubilaciones millonarias

    Atilano Soto, expresidente de Caja Segovia

    efecom
    Valladolid,

    El expresidente de Caja Segovia Atilano Soto se ha negado a responder a las preguntas de la acusación por problemas de memoria debido a sus 82 años, pero en respuesta a su abogado defensor ha dicho que "todos los consejeros estuvieron de acuerdo con la legalidad de las prejubilaciones".

    Soto, presidente durante 16 años de la entidad, ha declarado este miércoles como investigado en el caso de las prejubilaciones millonarias de Caja Segovia y ha reconocido que fue el encargado de exponer en 2011 la situación sobre el plan de prejubilaciones al consejo de administración.

    Ha relatado que "todos los consejeros presentes, pero también los ausentes", avalaron la legalidad de las prejubilaciones -que posteriormente se asignarían a 13 directivos y que superaban los 17 millones de euros- ya que corroboraron el acta que se leyó en una reunión posterior.

    Soto ha asegurado confiar plenamente en los directivos de la entidad que, a su juicio, demostraron una andadura "magnífica", por lo que la Comisión de Control nunca encontró "mácula".

    La exvicepresidenta segunda Elena García Gil también ha declarado como cooperante necesaria para la comisión de apropiación indebida y administración desleal y ha esgrimido que la comisión de retribuciones recibía la información, la debatía y aportaba las consideraciones oportunas, pero el consejo de administración tenía la potestad de aprobarlas.

    En su opinión, los consejeros tenían información "suficiente" para tomar las decisiones en esta materia, ya que contaban con la explicaciones pertinentes del director de Recursos Humanos y los informes de los asesores. Además ha asegurado que era consciente del desembolso que supondrían para la caja estas prejubilaciones.

    Ha indicado que conocía que los fondos propios de Caja Segovia pasaron de 347 millones en 2009 a 125 millones en 2010, pero se debió "a un cambio de criterio en la contabilidad".

    Una de las modificaciones fue cambiar el criterio para que en las prejubilaciones no se tuvieran en cuenta las retribuciones de los tres últimos años, solo las de los últimos doce meses, pero, a su juicio, este cambio deja "cantidades muy parecidas".

    Las ayudas que del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) otorgó, cercanas a 4.500 millones cuando las cajas se integraron en Bankia, "no afectaban a Caja Segovia" ni tenían "nada que ver" con la gestión de la caja, ha asegurado.

    Y ha advertido de que no tiene la sensación de haber "perjudicado" a la caja ni de haber cometido ningún delito porque nunca dio instrucciones para que se maquillasen unas cuentas que, como ha detallado, "nunca han sido fiscalizadas ni censuradas por el Banco de España".