Canarias
El turismo peninsular, clave para salvar Canarias del desastre
- Para la titular de Turismo en Canarias hay un receta que puede dar buenos resultados
José L. Jiménez
Las Palmas de Gran Canaria,
Que Canarias supere el confinamiento económico depende en buena medida de la presencia de turismo peninsular en sus viviendas vacaciones y complejos de apartamentos y hoteles urbanos. La consejera de Turismo del Gobierno de Canarias, Yaiza Castilla, defiende la tesis de activar un plan nacional de incentivos para que el turismo peninsular venga a Canarias. Así explicaba El Economista los efectos del coronavirus en Canarias el 3 de marzo, antes de la declaración de pandemia. En las islas la situación económica es de parón total. No solamente es el sector alojativo. Grandes empresas de suministros que todos los meses facturaban el 91% de sus servicios al sector, se han quedado a cero.
Para la titular de Turismo en Canarias hay un receta que puede dar buenos resultados. Emplear la estructura del Imserso, "darle la vuelta y enfocarla a otros sectores, ya sea por edad o, por ejemplo, por actividad". A su juicio, los funcionarios que han estado en el frente de lucha contra el coronavirus es un colectivo que puede tener capacidad económica y necesita un descanso: integrantes de la Operación Balmis, médicos, enfermeros y sanitarios. La viceconsejera de Turismo del Gobierno de Canarias, Teresa Berástegui, ha destacado la "fortaleza" del turismo en las islas y augura que saldrá de la crisis derivada de coronavirus "antes de lo previsto".
Canarias busca en el mercado peninsular ese amortiguador en lo que se aclaran las limitaciones de potenciales visitantes nórdicos, alemanes y británicos. El turista nacional no precisa de cuarentena a su llegada al destino. Antes de la crisis del coronavirus en Canarias las aerolíneas esperaban desplazas para verano 9.865.482 turistas ante los 9.968.683 del mismo periodo del año anterior. Un descenso de plazas de 103.201 turistas que el Gobierno de Canarias estaba siguiendo de cerca. Entre el 21 de junio y 21 de septiembre de 2020, la previsión de llegada de turistas total era del 6,6 millones de turistas, 212.930 extranjeros, un -3,1%.
En cuanto a peninsulares, si en verano de 2019 la cifra fue de 3.150.001 turistas en 2020 se esperaba llegar a 3.259.730 personas, es decir, un aumento de 109.729 plazas (+3,5%). Se trata de una temporada donde los nórdicos suelen fallar. Gran Canaria es la isla que mejor esperaba resistire con descensos de extranjeros pero aumento de peninsulares: apenas se deja 42.000 turistas mientras que Tenerife pierde la cifra de 4 millones de turistas hasta colocarse en 3,9: esperaba perder en verano de 2020 98.476 plazas ocupadas en aviones con descensos entre alemanes, británicos y, levemente, peninsulares. El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha vuelto a insistir en la necesidad de que los turistas que quieran viajar al archipiélago se sometan a test PCR en sus países de origen para que así la actividad turística pueda sumar un "plus de seguridad". Ángel Víctor Torres incide en que queda un mes para cerrar todos los protocolos y reiteró que lo fundamental es que se hagan test en origen para que los aviones puedan venir llenos y el trayecto sea seguro.
En su opinión, todo lo alcanzado hasta ahora se irá "al traste" si no se garantiza la "máxima seguridad sanitaria". Por ello, ve fundamental los test en origen y agregó que se están haciendo esfuerzos para que haya un protocolo internacional y se tenga ese plus de seguridad. Sobre los 189.000 millones de fondos europeos que irán destinados al turismo, de los que España prevé recibir unos 140.000 millones, el presidente de Canarias señaló que contar con este fondo es "ir en el buen camino" pero "esto se tiene que cerrar", y espera que cualquier modificación cambio sea "para mejor". Ángel Víctor Torres confía en que está comisión bilateral se celebrará pronto y se mostró convencido de que finalmente se permitirá usar el superávit para hacer frente a la merma de recursos, así como consensuar y buscar otros modos de endeudamiento para responder a la situación social en 2021, 2022 y 2023.