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Actuaciones en el sector hídrico para un mundo más sostenible

  • Ofrecido por Agbar
  • Se calcula que la demanda de agua aumentará entre un 20% y un 30% de aquí a 2050
La ecofactoría Sur de Granada, referente de economía circular en Europa

EcoBrands
Madrid,

Agbar, parte del grupo Veolia, está sensibilizado acerca de la importancia de cuidar el medioambiente y, especialmente, los recursos hídricos, hacia los cuales se orienta gran parte de su actividad. Por ello, ha llevado a cabo distintos proyectos relacionados con la sostenibilidad.

El cambio climático se ha intensificado en los últimos años, según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), dependiente de la ONU. De acuerdo con los resultados de sus últimos informes, el calentamiento global está aumentando y algunos efectos en los ecosistemas serán irreversibles, como es el caso de la pérdida de biodiversidad.

Mirando concretamente al sector del agua, los recursos hídricos cada vez se ven más afectados por este fenómeno. En 2030, se estima que el 47% de la población vivirá en áreas con estrés hídrico y esta situación se agravará en un contexto de crecimiento de la población mundial, con una mayor demanda de recursos y alimento. De forma específica, se calcula que la demanda de agua aumentará entre un 20% y un 30% de aquí a 2050.

Poniendo el foco en España, es uno de los países de la Unión Europea más afectados por el cambio climático, y cuya escasez de agua es actualmente un desafío importante, con algunas zonas más afectadas que otras; incluso en aquellas que habitualmente no padecen de falta de agua, como Galicia.

Por todas estas circunstancias, el contexto actual requiere de cambios transformadores por parte de toda la sociedad, incluyendo las administraciones, las empresas y la ciudadanía en general. Los seres humanos dependen de ecosistemas estables y saludables para su propia supervivencia, por lo cual es imprescindible realizar acciones urgentes para encaminar al mundo hacia un futuro más sostenible, mediante proyectos responsables con el planeta y que doten de una mayor resiliencia a las ciudades.

Un grupo comprometido

El sistema de reutilización de agua de la depuradora de Cabezo Beaza está enfocada el 100% a uso agrícola

Agbar, parte del grupo Veolia, ofrece soluciones innovadoras en torno a la gestión sostenible del agua y los recursos naturales para las ciudades, la agricultura y la industria, en línea con la hoja de ruta de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas. En España, Agbar presta servicio de agua a 13,6 millones de personas, en 1.100 municipios.

Además, ejerce el papel de hub de conocimiento del agua, reforzando la actividad de este recurso en Veolia, quien también actúa en ámbitos de energía y valorización de los residuos. De esta manera, Veolia se posiciona como referente mundial de la transformación ecológica en los 5 continentes, con 220.000 colaboradores.

Con la base de la innovación y la digitalización, y el impulso de las alianzas, el grupo apuesta por el desarrollo de soluciones sostenibles para avanzar en la transformación ecológica, que generan un impacto positivo en beneficio de las personas y del planeta.

Dentro de su estrategia, tiene especial relevancia la economía circular, ya que la empresa contribuye a este modelo a través de sus soluciones de residuo 0. Se trata de una iniciativa muy importante, ya que los sistemas actuales de producción y consumo han demostrado ser nocivos para el medio ambiente y agravan la crisis climática actual, por lo que se hace necesario un modelo circular que imite a la naturaleza y donde desaparezca el concepto de residuo.

En este ámbito, uno de sus proyectos pioneros es la transformación de las depuradoras tradicionales en ecofactorías, un modelo reconocido por Naciones Unidas como proyecto destacado en la lucha contra el cambio climático. El objetivo es regenerar agua para nuevos usos (riego agrícola, uso industrial, limpieza de calles, etc.), valorizar los residuos para nuevos recursos (por ejemplo, los lodos de depuración se valorizan como abono en agricultura), producir energías renovables con el fin de conseguir el autoabastecimiento de la planta, generando un impacto positivo sobre el entorno.

Por otro lado, ante el actual contexto de escasez hídrica, Agbar apuesta por la reutilización de las aguas residuales, para evolucionar de un modelo de economía lineal hacia un modelo de economía circular, retornando el agua depurada y regenerada con una calidad óptima al medio del que se extrajo. Esta agua se puede volver a utilizar en agricultura, en industria, así como en las propias ciudades a través de, por ejemplo, el riego de parques o baldeo de calles. Esto permite reducir la presión sobre los recursos hídricos en un contexto de creciente sequía.

Actualmente, la compañía reutiliza 128,7 hm3 de agua regenerada al año, de los que el 53% se destina a usos agrícolas.

En materia de infraestructuras, Agbar impulsa el desarrollo de modelos respetuosos y responsables con el clima y el entorno, a través de la implantación de infraestructuras verdes, mediante soluciones basadas en la naturaleza, tanto en el ámbito urbano como en espacios de interés natural, preservando la biodiversidad y los servicios ecosistémicos que se generan. Así, entre las iniciativas llevadas a cabo por Agbar para la naturalización de sus instalaciones, que permiten mejorar la calidad ecológica de las zonas verdes y preservar la biodiversidad local, destacan: la eliminación del uso de productos fitosanitarios y pesticidas, el control de especies invasoras y la incorporación de especies autóctonas que favorecen a insectos polinizadores y aves, la creación de refugios para polinizadores, aves, murciélagos, rapaces, la instalación de hoteles de insectos y mariposas, etc.

Casos de éxito

Gracias a las distintas iniciativas puestas en marcha por Agbar, la empresa ha llevado a cabo distintos casos de éxito en las diversas áreas en las que trabaja.

Uno de ellos, relacionado con la economía circular, es la ecofactoría Bio Sur de Granada, gestionada por Emasagra, parte del grupo Agbar. Esta se ha convertido en un referente a escala internacional, ya que se ha conseguido que el 100% del agua depurada se reutilice para el riego de cultivos leñosos y mantenimiento del caudal mínimo ecológico del Río Genil; la totalidad de los lodos, arenas y grasas se valoricen como abono en agricultura o jardinería, y se consiga un balance energético positivo, generando más energía renovable de la que se consume de la red eléctrica. En 2021, el autoabastecimiento de la instalación alcanzó el 120%. Su modelo de gestión ha sido reconocido como buena práctica por la publicación European Circular Economy Stakeholder Platform.

A su vez, la depuradora de aguas residuales Cabezo Beaza de Cartagena, gestionada por Hidrogea, parte del grupo Agbar, trata 7.319 litros de agua al día, lo que equivale a abastecer de este preciado recurso a 4.300 hectáreas de cultivo. El sistema de reutilización de agua, que en este caso está enfocado al 100% a uso agrícola, está contribuyendo a paliar los efectos de la sequía en el Campo de Cartagena.

Por último, otro de sus proyectos exitosos es la potabilizadora de Sant Joan Despí, gestionada por Aigües de Barcelona y ubicada en una zona periurbana del área metropolitana de Barcelona junto al río Llobregat. En ella, se ha realizado la creación de una reserva de mariposas y de 42 especies florales, además de la instalación de hoteles de insectos, cajas-nido para rapaces nocturnas, murciélagos y aves, así como refugios para erizos y anfibios.

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