Las capitales del Patrimonio de la Humanidad, de Parador en Parador

Nuestro país cuenta con un patrimonio y una historia sin precedentes. Diferentes pueblos, culturas y civilizaciones han pasado por España dejando tras de sí uno de los legados culturales más ricos del mundo. Prueba de ello son las numerosas Ciudades Patrimonio de la Humanidad existentes en el territorio español. Municipios singulares con numerosos lugares de interés, experiencias culturales y donde el casco histórico o algún monumento ha sido declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO.

Con Paradores, y su extensa red de alojamientos, podrás descubrir 11 ciudades españolas catalogadas Patrimonio de la Humanidad mientras disfrutas de su excelente gastronomía y te sumerges en su interesante cultura, conociendo todo sobre su historia y su arte.

Segovia es más que un acueducto

Los primeros asentamientos de esta ciudad se remontan a la prehistoria. Se trata de un lugar en el que han confluido numerosas culturas, y por la que pasaron algunas de las civilizaciones más importantes de la península como los Romanos y los Visigodos. El Parador de Segovia, un moderno edificio, caracterizado por sus amplios y acogedores espacios, es el lugar perfecto para hacer una escapada de fin de semana y conocer una de las ciudades más monumentales de España. ¿Quién no quiere conocer todo lo que esconde esta ciudad?

Además de su famoso acueducto, también cuenta, entre otros muchos monumentos, con una impresionante Catedral y un Alcázar que te transportarán a otra época. El Parador ofrece una espectacular panorámica de esta preciosa Ciudad Patrimonio de la Humanidad y cuenta con una excelente oferta de servicios para relajarse y descansar, con gimnasio, piscina climatizada y sauna.

Salamanca y su espíritu universitario

La ciudad universitaria por excelencia está repleta de vida y de planes culturales y gastronómicos. Oficialmente, se dice que la historia de Salamanca comienza en el año 220 a.C., año en el que el general cartaginés Aníbal conquistó la ciudad, conocida por aquel entonces como Helmántica. Desde entonces, la ciudad ha servido como cruce de movimientos culturales y artísticos, y cuenta con la Universidad más antigua de España. El parador de Salamanca, ubicado en la margen izquierda del río Tormes, cuenta con una espléndida panorámica de la ciudad.

Los enormes ventanales que lo caracterizan ofrecen una vista única de su impresionante casco histórico. La Plaza Mayor, la Casa de las Conchas o la Catedral Vieja, sin olvidar la histórica Universidad, son algunos de los monumentos que han llevado a esta ciudad a ser declarada Patrimonio de la Humanidad.

Una experiencia señorial en Úbeda

Esta ciudad, fue elegida por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad por su singular casco urbano histórico y por la excelente conservación de sus edificios renacentistas. De hecho, el Parador de Úbeda se encuentra ubicado en uno de los edificios más representativos del Renacimiento en la ciudad, y permite disfrutar, desde dentro, de uno de los bienes culturales más valorados de esta ciudad, el Palacio del Deán Ortega. Este palacio renacentista del siglo XVI, el primero convertido en Parador en 1930, contó para su construcción con el arquitecto real, Luis de Vega, y con uno de los mejores de todo el movimiento renacentista, el arquitecto Andrés de Valdevira.

El Parador de Úbeda a la izquierda de la foto.

Este impresionante alojamiento se encuentra en uno de los rincones más representativos de la ciudad, en la plaza Vázquez de Molina junto a la Capilla del Salvador, y destaca por su simétrica fachada con balcones que tiene unas curiosas ventanas esquineras en el segundo piso. Además, el patio central del palacio es uno de los más bonitos de la ciudad.

¿Qué esconden las murallas de Ávila?

Las conocidas murallas de Ávila se construyeron para proteger, no sólo a los habitantes de la ciudad, sino también el hermoso patrimonio histórico que guarda en su interior. Un conjunto monumental que agrupa iglesias, conventos y palacios renacentistas como ninguna otra ciudad en nuestro país. Una de las joyas de la ciudad es el Palacio Piedras Albas, en el que se encuentra el Parador de Ávila. Se ubica en pleno casco histórico y está adosado a las murallas de la ciudad, las mejor conservadas del mundo.

Un manso lugar en el que desconectar y el lugar ideal desde el que visitar esta ciudad Patrimonio de la Humanidad. Asimismo, en su amplio comedor podrás degustar unas riquísimas patatas revolconas o unos judiones de El Barco de Ávila, mientras disfrutas de las preciosas vistas de su jardín y de las murallas, a través de un alucinante patio acristalado.

La cervantina Alcalá de Henares

Alcalá de Henares es la primera ciudad española que fue diseñada y construida especialmente como sede de una universidad, y este diseño, además, sirvió como modelo para la construcción de numerosos centros a lo largo de Europa y América. Su conjunto de edificios universitarios, su casco urbano histórico y la enorme influencia mundial que supuso la obra maestra de Miguel de Cervantes, son algunos de los criterios que llevaron a la UNESCO a nombrar Alcalá de Henares como ciudad Patrimonio de la Humanidad. Actualmente, el Parador de Alcalá de Henares se presenta como la combinación perfecta entre tradición y modernidad.

El edificio del Parador es un antiguo colegio-convento del siglo XVII que se funde en una combinación de decoración y diseño minimalista, sin perder su histórica esencia. El espectacular jardín tallado de su cubierta está horadado por pequeños patios que arrojan luz sobre sus acogedoras habitaciones. Además, este parador cuenta, bajo las bóvedas de la iglesia del antiguo convento, con un precioso spa en el que uno puede relajarse y descansar tras visitar la ciudad.

La grandeza cultural de Córdoba

Esta ciudad ha sido protagonista de grandes momentos históricos, desde la época romana pasando por el Califato de Córdoba y hasta la actualidad. Grandes civilizaciones han hecho de esta ciudad su centro neurálgico gracias a la gran riqueza cultural que encontraron en su interior y que aún mantiene en la actualidad. Cristianos, judíos y musulmanes convivieron durante siglos en sus calles, una unión de culturas que configuraron una ciudad con uno de los cascos urbanos más curiosos y llamativos de nuestro país.

El Parador de Córdoba, construido sobre las ruinas del Palacete de verano de Abderramán I, es el lugar perfecto para visitar la legendaria ciudad de los califas. Las vistas de la ciudad que ofrece su elevada ubicación son estupendas y su restaurante ofrece los mejores platos de gastronomía local, como el salmorejo, la mazamorra o las crujientes berenjenas rebozadas con miel de caña. Una ciudad exquisita para el paladar y para la vista.

Quédate 'colgado' de Cuenca

Si lo que se busca es una ciudad medieval que conserva su paisaje urbano original, así como la confluencia perfecta con el paisaje natural que la rodea, Cuenca es el ejemplo perfecto. Una ciudad que cuenta con una de las maravillas de la arquitectura popular española, las Casas Colgadas, unos edificios que parece mentira que fueran construidos entre los siglos XIII y XVI. En este caso, el Parador de Cuenca ya se presenta como un destino en sí mismo y se encuentra en el convento de San Pablo, uno de los monumentos más representativos de la ciudad.

Su privilegiada ubicación, junto al puente de San Pablo, ofrece unas vistas estupendas de las Casas Colgadas y una panorámica espectacular de la ciudad. Además, tiene una cafetería en la antigua capilla del convento, un precioso claustro acristalado con arcos de medio punto y un patio central donde podrás degustar los mejores platos de la zona, como el morteruelo, el lomo de cierva de la serranía de Cuenca o las migas manchegas.

Toledo, la ciudad de las tres culturas

Los visigodos encumbraron Toledo como centro para su gobierno y como núcleo religioso para el cristianismo, una grandeza que no ha perdido desde entonces. Esta ciudad ha sido capital del Reino de España durante siglos y un ejemplo de la convivencia de diferentes pueblos.  Sinagogas, mezquitas e iglesias invaden este municipio, que recibe, con todo el sentido del mundo, el nombre de la ciudad de las tres culturas.

El Parador de Toledo es el lugar ideal para disfrutar de esta ciudad con tanto encanto y en la que se puede disfrutar de su interminable historia. Se encuentra en un imponente edificio de estilo toledano, con amplios porches de madera desde donde deleitarse con las mejores vistas de la ciudad. Asimismo, en el restaurante del Parador se pueden degustar las maravillosas recetas de la región, como la perdiz estofada, el cordero asado o el pisto manchego, todo maridado con los mejores vinos de la zona.

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