Santander pide rescatar activos fiscales de Popular por 1.000 millones

El actual presidente del Popular y vicepresidente del Santander, Rodrigo Echenique, aseguró ayer que el grupo ha pedido al Ministerio de Hacienda hasta 1.000 millones de euros para este año por los activos fiscales del Popular, tal y como adelantó elEconomista. Será la Administración la que decida si los recibirá vía pago o compensación.

Por otro lado, el ejecutivo reconoció que el grupo cántabro no ha encontrado "inexactitudes ni falsedades" en las cuentas de 2016 de la entidad adquirida, aunque matizó que serán los jueces los que tengan que pronunciar. La presunta falsedad de los estados contables del Popular de 2016 es una de las piezas principales que se investiga en la Audiencia Nacional por la vía penal contra la gestión del expresidente del banco, Ángel Ron, y su cúpula, y en la que se basan centenares de demandas civiles de inversores que fueron a la ampliación de capital.

"El Popular no era un objetivo inmediato ni prioritario para el Santander"

Rodrigo Echenique aseguró en su intervención en la comisión del Congreso que investiga la crisis financiera que fue "dramático" que el Popular se viera en un proceso de resolución, aunque detalló que el banco "era bueno hace 30 años".

Así, relató que el Santander tenía preparada la opción de comprar la entidad en resolución desde que determinaron no hacer una oferta por el banco en mayo (tras acceder a los datos de la entidad en el proceso de compra privado en el que participaron) y decidir que las ventajas estratégicas no compensaban los riesgos y contingencias a asumir. "El Popular no era un objetivo inmediato ni prioritario para el Santander", dijo. También señaló que la resolución y posterior compra fue la mejor opción puesto que una liquidación hubiera supuesto quitas a los depositantes.

Según el vicepresidente del Santander, la caída del Popular se debió a un problema de liquidez. A fecha de la resolución, el ratio de liquidez del banco era del 77%, cuando debe superar el 100%.

Por otro lado, Echenique defendió, en contra de la actitud de la Junta Única de Resolución (JUR) europea, que el proceso de resolución debe ser "transparente" y explicar a los afectados por qué perdieron su dinero. No obstante, aseguró que el Santander se negó a que se publicaran los datos del informe de Deloitte relativos a la litigiosidad del Popular (por cuestiones judiciales) y de los activos (por competencia). "Es necesario mejorar la transparencia del proceso a la ciudadanía. Aquí no ha habido conspiraciones ni cosas raras y hay que explicarlo bien a la gente que ha perdido su dinero, porque para que llegue a la conclusión de que si uno apuesta por un instrumento volátil, debe saber que es volátil", explicó. Finalmente, el presidente del Popular adelantó que la integración del banco con el Santander costará entre 1.200 y 1.300 millones. El grupo prevé culminar los ajustes tanto de personal como de oficinas dentro de un año, coincidiendo con la desaparición de la marca.