Banca y finanzas

Fainé advierte del riesgo de una nueva burbuja por los tipos de interés al 0%


    elEconomista.es

    El presidente de la patronal de cajas de ahorros europea (ESGB, por sus siglas en inglés), y presidente de Caixabank, Isidro Fainé, alertó ayer de los riesgos a los que se enfrenta el sector financiero en el Viejo Continente. Durante la conferencia anual de ESGB, celebrada en Bruselas, el banquero hizo hincapié en los peligros que supone operar con tipos de interés en mínimos históricos -en la actualidad en el 0%-. A su juicio, esta situación "incrementa el riesgo de crear nuevas burbujas en el precio de los activos" y "dañan a los ahorradores", además de mermar los márgenes de las entidades.

    Fainé consideró que los intereses en tasas ultrabajos generan esta serie de retos, aunque reconoció que "podrían ser deseables desde el punto de vista macroeconómico".

    En este contexto, reiteró la necesidad de la banca de elevar los ingresos por servicios a través de más comisiones, que compensen la caída de los márgenes, al igual que rebajar los costes operacionales.

    En su discurso, el presidente de la patronal de cajas europea destacó también el desafío que conlleva esta coyuntura para afrontar la lucha contra la exclusión financiera. Explicó que 20 millones de personas en la UE no tienen acceso a los servicios bancarios a un coste razonable, por lo que apostó por afianzar el modelo de microfinanzas.

    Principal reto, la confianza

    Pese a estos riesgos, Fainé indicó que actualmente el mayor reto para la banca minorista es "recuperar la confianza perdida". En su opinión, "debemos regenerarla a través de la honestidad, la profesionalidad, la empatía y el diálogo".

    Acto seguido, recordó que la confianza de los clientes se ha ido resquebrajando como consecuencia de la crisis financiera. Por ello, subrayó que "si no hay confianza, no hay negocio". Para cambiar esta situación, abogó por reactivar el diálogo con los clientes y asegurar que la regulación "nos ayude".

    Sobre la normativa, el máximo responsable de Caixabank reclamó que ésta sea proporcional, es decir, que se adecue a los riesgos de cada una de las entidades. La banca española lleva años reclamando esta diferenciación porque, como señaló Fainé, "una única receta es un planteamiento que no funciona" y que "daña el rol vital de las entidades arraigadas en sus territorios como proveedores de servicios y financiación para la economía real".

    En este sentido, expuso que la diferenciación debería basarse en el tamaño, el modelo de negocio y la estructura de propiedad. "Este modelo estaría más en línea con el objetivo de la Comisión Europea de hacer una legislación más clara, más simple y menos costosa", indicó.

    También aprovechó el acto para volver a pedir un marco regulatorio para todos los agentes del mercado. Es decir, que las autoridades pongan en marcha unas reglas a los nuevos competidores, como las fintechs o la denominada banca en la sombra, que amenazan una parte importante del negocio de las entidades. A juicio del presidente de Caixabank, este marco debería ser "justo y coherente".