Barclays adquiere sedes y créditos a su filial antes de traspasarla a Caixabank

La venta de la filial de banca minorista a Caixabank movió a Barclays a reordenar algunos activos para continuar, sin grandes cambios, su operativa en banca de inversión, en banca corporativa y el negocio de tarjetas en España. El británico adquirió a Barclays Bank SAU -la subsidiaria adjudicada al grupo presidido por Isidro Fainé- su emblemática sede en la madrileña plaza de Colón, el macrocomplejo Plaza de Zaragoza y una cartera de créditos por un montante conjunto de 121,5 millones de euros.

Las transacciones se ejecutaron entre noviembre y el 3 de diciembre de acuerdo a información de la entidad registrada en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Es usual la reordenación de activos, participadas e, incluso negocio, cuando se escinde una división para su enajenación, lo que tiene a condicionar el precio. Caixabank cerró la compra en 820 millones de euros de una enseña que le aportará 550.000 clientes de un perfil alto, medio alto de rentas, con fuerte posición en la capital; y sumará a su balance 21.600 millones de euros en activos, casi 5.000 millones de ellos fuera de balance.

Créditos por 48 millones

La transferencia de mayor importe correspondió a una cartera de inversión crediticia, con un valor en libros en Barclays Bank SAU de 47,9 millones, y por la que su matriz abonó 48,2 millones. El portfolio es susceptible de incluir derivados, productos corporativos o financiación de clientes que el británico continuará atendiendo a través de su banca de inversión, corporativa o de las tarjetas. La unidad vendida a Caixabank contaba con una cartera de clientes-empresas 'Vips' o vinculados a compañías grandes, tipo Ibex35, pero otros los seguirá atendiendo desde el grupo Barclays.

Los activos de mayor relieve son, sin embargo, los inmuebles. La multinacional con sede en Londres se garantiza la propiedad del edificio madrileño en la Plaza de Colón 1, heredado entre el patrimonio de Banco de Valladolid cuando lo adquirió hace dos décadas y que albergaba gran parte de los efectivos en las tres plantas del inmueble. El edificio anejo, del número 2, lo ocupaban también unidades de la entidad en alquiler a su propietario, Mutua Madrileña. Esta compra se cerró en 15,1 millones, lo que permitirá a la filial de banca minorista aflorar plusvalías, dado que lo tenía contabilizado en 6 millones.

Pasa igualmente a la matriz la Plataforma Logística de Zaragoza (Plaza) un complejo de grandes dimensiones montado por el antiguo Zaragozano, adquirido por el británico en 2004 y donde alojó su call center. El traspaso de esta plataforma de atención telefónica, que emplea a unos 400 trabajadores ha sido, no obstante, progresivo. A principios del pasado año recuperó el servicio externalizado en 2010 a Hewlett Packard (HP) con su empresa Iberalbión. Más recientemente y tras la decisión de relanzar el negocio de medios de pago en España bajo la marca BarclayCard, inició el traslado de parte de la gestión de tarjetas europeas ubicado en Dublín a Zaragoza.

Negocio asegurador

Entre los activos traspasados figura también el negocio asegurador. El grupo adquirió a su subsidiaria el operador de bancaseguros por 18,2 millones y pagó otros 22,6 millones por el 5,34 por ciento que controlaba en CNP Barclays Vida y Pensiones, antes de poner fin a la joint venture con el CNP Assurances por 453 millones de euros.

Caixabank se queda así con la entidad de banca minorista una vez escindido dicha actividad, ahorrándose la resolución o replanteamiento de alianzas como ha hecho con otros pactos en Cívica o Banco de Valencia. El banco de La Caixa invertirá 300 millones en la integración y aspira a sacar ahorros de 70 millones este año y 150 millones el próximo. Gran parte provendrán del ajuste de plantilla: despedirá a 975 personas, ha ofrecido 727 recolocaciones y 280 prejubilaciones.