Banca y finanzas

Metro Bank cierra una financiación con el inversor de la casa Gilinski y sin Santander

  • Inyectarán 1.000 millones en diferentes productos
  • EY estuvo buscando posibles compradores con otras entidades
Una sucursal de Metro Bank.

Lucía Gómez

El británico Metro Bank ha conseguido salvarse tras conseguir una financiación de 1.000 millones de euros (925 millones de libras) que, en su mayoría, aporta el colombiano Jaime Gilinski. Durante todo el fin de semana, EY estuvo empujando posibles ofertas de grandes bancos para hacerse con la quinta entidad del país. Entre los nombres que sonaban estaba el de Santander, acompañado de otros locales como NatWest y Lloyds, que finalmente no tomó parte en la operación.

Las medidas consisten en una ampliación de capital de 325 millones de libras esterlinas (375 millones de euros) y una refinanciación de la deuda de 600 millones de libras (693 millones de euros), según informó el banco en un comunicado. El capital es proporcionado principalmente por los inversores ya existentes e incluye 150 millones de libras esterlinas de nuevas acciones. Además, incluye 175 millones de libras a través de nuevos bonos bail-in, es decir, a través de recapitalización interna, con vencimiento en 2028

Esta operación, según destaca Bloomberg, impondrá un recorte de hasta el 40% para algunos tenedores de bonos emitidos con anterioridad.

Gilinski es uno de los inversores significativos de Metro Bank desde 2019 y ahora refuerza su apuesta por la entidad británica. "El paquete anunciado hoy permite al banco seguir creciendo y construir sobre la base del trabajo fundacional realizado en los últimos tres años", dijo Gilinski en el comunicado. 

La entidad tiene 76 sucursales, 2,8 millones de cuentas de clientes y 22.000 millones de libras de activos totales, según los datos de cierre del primer semestre. El banco, que abrió sus puertas en 2010, es uno de los bancos británicos que ha apostado por construir una red de sucursales por todo el país. 

En los últimos años, Metro Bank ha pasado por situaciones difíciles después de que a principios de 2019, revelase que había estado aplicando por error una ponderación de riesgo demasiado baja en algunas de sus hipotecas. Eso llevó a la desconfianza de los inversores que tiñó el valor de rojo e incluso les conllevó multas regulatorias.