Aragón

CGT, OSTA e IA llaman a los trabajadores salir a la calle para defender sus derechos


    elEconomista.es
    Zaragoza,

    Las organizaciones sindicales exigen para este 1º de mayo la derogación de las últimas reformas laborales y de la Ley mordaza, además de rechazar el Pacto de Toledo. También piden empleos estables con salarios y condiciones dignas para acabar con la brecha salarial de género.

    Estas son algunas de las principales reivindicaciones a las que también se suman otras demandas como servicios públicos con derechos esenciales de las personas y unas pensiones suficientes en las que no se marginen a las personas mayores y que garanticen a su vez el poder adquisitivo.

    Igualmente, muestran su rechazo al pago de la deuda ilegítima y demanda políticas de inmigración hechas desde el máximo respeto a los derechos humanos, recordando en este sentido que "ningún ser humano es ilegal".

    Estas reivindicaciones son las principales que se oirán el día 1º de Mayo por parte de estas organizaciones sindicales que llaman a los ciudadanos y trabajadores a salir a la calle para gritar "¡¡¡Toma la iniciativa, la lucha sí que sirve!!! ¡¡¡Gobierne quien gobierne, los derechos se defienden!!!".

    Son demandas en el Día del Trabajo en el que "debemos recordar a quienes nos precedieron en la lucha en pro de la libertad y de la justicia social. Aquellas mujeres y hombres que, con su tesón, esfuerzo y ejemplo de vida nos marcaron el camino de la unidad, la solidaridad y el apoyo mutuo, sin los cuales la clase dominante esclaviza a la clase obrera".

    Desde las organizaciones sindicales indican que, "es nuestra obligación dar un paso al frente y tomar la iniciativa para demostrarle a esta sociedad que la lucha sí que sirve. Solo con la unidad y solidaridad de la clase trabajadora conseguiremos poner encima de la mesa nuestras reivindicaciones, que los grandes poderes del capital nos vienen negando históricamente".

    Además, han añadido que "la lucha sirve, claro que sirve. Y un claro ejemplo lo tenemos en el imparable movimiento feminista. Por ello, hoy redoblamos nuestro esfuerzo y levantamos aún más alto la voz para, desde nuestro sindicalismo de base comprometido con el feminismo, condenar la brecha de género y decir alto y claro que no vamos a reblar y no vamos a ceder ni un milímetro en las conquistas que con tanto esfuerzo se han ido consiguiendo. En la lucha nos encontrarán aquellos que pretenden devolver a esta sociedad al siglo XIX, codo con codo pelearemos hasta conseguir la igualdad real".

    También se van a "defender unas pensiones dignas y justas, que recojan las pensiones como un derecho constitucional, derogando el artículo 135 de la CE, e incluirlas en los Presupuestos Generales del Estado. Para que se garantice la dignidad de nuestros mayores. Unas pensiones que les permitan vivir y no solo sobrevivir, pues tras una vida de lucha y sacrificio lo merecen. El inconformismo tozudo, el compromiso y la rebeldía de nuestros mayores nos marcan el camino".

    Las tres organizaciones sindicales han apostado por "un sindicalismo combativo, honesto y valiente. Que no se conforma con parches y remiendos. Un sindicalismo que dice alto y claro que hay que derogar las dos últimas reformas laborales, que no han traído más que precariedad y pérdida de derechos".

    En este sentido recuerdan que, en Aragón, "las sucesivas reformas laborales, sumado a la centralización de la negociación colectiva y la consolidación de la precariedad en uno de los grandes sectores de nuestro país, que es la automoción, es el ejemplo más claro de pérdida de derechos. En la principal empresa del sector industrial aragonés PSA-Opel, la firma de su convenio, con el beneplácito del Gobierno aragonés y la firma cómplice de los dos sindicatos institucionalizados, está sirviendo ahora de ejemplo a exportar en aquellas auxiliares de su entorno. Para toda esa gente, tenemos un mensaje muy claro: allí donde no se planta cara, se retrocede en derechos. Por tanto reiteramos: la lucha sí que sirve".

    Los sindicatos también ponen el foco en la "precariedad de las últimas reformas laborales nos han traído multitud de situaciones en fraude de ley. Desde las ETTs y las empresas multiservicios que campan a sus anchas a esa mal llamada economía colaborativa. Bajo ese aire moderno auspiciado por los medios de comunicación masivos se esconde el esclavismo de siempre. Y con él un nuevo nicho de falsos autónomos: de patinetes a bikers, de kellis a los empleados de las cárnicas".