Aragón
Las cooperativas agroalimentarias abogan por una PAC que reconozca su papel en el medio rural
- Las cooperativas agroalimentarias de Aragón facturan más de 1.000 millones de euros
- Las 160 cooperativas emplean a más de 3.000 trabajadores
Eva Sereno
Las cooperativas agroalimentarias de Aragón mantienen buenas previsiones de producción para este año, pero están pendientes de la PAC, que debe identificar al agricultor profesional y reconocer el papel de las cooperativas en el mundo rural. Entre los próximos retos a afrontar está la incorporación de las mujeres y jóvenes al sector y en puestos de dirección, así como tener estructuras que permitan que los productos lleguen a un mercado global.
Las cooperativas agroalimentarias en la comunidad aragonesa manejan buenas previsiones para 2018. Sin embargo, esta situación halagüeña no implica que el sector tenga ante sí una serie de retos. "Estamos preocupados por la PAC", ha afirmado José Víctor Nogués, presidente de Cooperativas Agroalimentarias de Aragón, antes de comenzar la asamblea general ordinaria que han celebrado en Zaragoza para hacer balance del año y abordar el futuro del sector.
Y es que la PAC "debe identificar al agricultor profesional y a las cooperativas agroalimentarias le debe dar el papel que les corresponde en el medio rural. Se tiene que reconocer" la importancia de la agricultura, la agroindustria y de las cooperativas por su papel que hacen tanto económico como social al ayudar a fijar población en los municipios.
"En Europa, las cooperativas están más consideradas que en España y en Aragón. En la comunidad aragonesa se nos deja al margen de cualquier foro" para poder expresar su opinión. Una situación que se produce a pesar de que el sector agroalimentario es el segundo más importante económicamente en Aragón tras la automoción.
El reconocimiento de ese papel y tener voz no son los únicos retos a los que se enfrenta el sector, ya que también es necesario seguir avanzando en la incorporación de las mujeres y de los jóvenes al sector y a los puestos de dirección para lo que desde Cooperativas Agroalimentarias de España se ha comenzado a poner en marcha un programa específico que comprende estos ejes de acción.
Además, "tenemos que seguir, sobre todo, trabajando en que los productores aragoneses sean capaces de llegar a un mercado más global. Si no nos unimos, va a ser difícil poder llegar al consumidor", ha añadido el presidente de Cooperativas Agroalimentarias de Aragón.
Una necesidad de tener estructuras de comercialización mayores sobre las que el sector está concienciado, si bien hay sectores como el de la fruta en los que hay más individualismo. "Las cooperativas tenemos nuestra filosofía clara, pero nos matan los localismos. Lo de mi pueblo es el mejor, tiene que cambiar. Los mercados internacionales valoran la calidad según parámetros y para eso hay que ser empresas serias y con trazabilidad. La filosofía del localismo no triunfa" en los mercados.
De momento, la unión para comercializar se refleja en sectores como la alfalfa y el ovino en los que se está exportando y trabajando en acciones con Aragón Exterior, pero también "para ello se necesita volúmenes suficientes porque los contratos para China son de toneladas. Se precisa que haya una estructura detrás".
El sector en cifras
Son retos en los que está trabajando las cooperativas aragonesas que suman una facturación de más de 1.000 millones de euros. Una cifra que se eleva hasta los 1.600 millones de euros si se tienen en cuenta las ventas que se realizan a través de otras sociedades que son propiedad de las cooperativas.
La producción está creciendo, principalmente, por la puesta en marcha de regadíos y por las explotaciones ganaderas, sobre todo, de conejo, entre otras, como complemento a la explotación agraria.
En la comunidad aragonesa, hay más de 160 cooperativas, aunque la mayoría de ellas no son de gran tamaño. Aragón se caracteriza, además, por tener un mayor índice de asociacionismo, ya que se realizan actividades que requieren almacenamiento de productos o secaderos para la alfalfa, naves para la fruta o mataderos para la ganadería.
El sector emplea a más de 3.000 personas. En las cooperativas se ha producido un aumento del empleo un 7%. Un porcentaje que contrasta con la pérdida de empleo del 6% en la economía social en España y del 18% en el conjunto de la economía. Por cada empleo generado en el sector, se crean 3,5 indirectos.