Esri crea mapas inteligentes que previenen las inundaciones por la crecida de ríos
Eva Sereno
Los mapas inteligentes de la empresa Esri, que comenzó su actividad hace 50 años en Estados Unidos, permiten tomar decisiones de manera rápida y coordinada para ayudar a los afectados por inundaciones como las que han sucedido en Aragón por la crecida del Ebro. La compañía aplica su propia tecnología, que combina con imágenes capturadas por drones o vía satélite, entre otras técnicas, para extraer información y comparar el antes y el después de una crecida del río, de manera que se puede conocer con exactitud las afecciones sobre infraestructuras, carreteras o cultivos. Un sistema que también es válido para la contención y prevención de inundaciones.
Las crecidas de los ríos son objeto de preocupación porque conllevan daños en muchas localidades en las que se registran afecciones por las inundaciones en infraestructuras, granjas ganaderas, cultivos y también en viviendas, llegándose incluso a producir pérdidas personales.
La tecnología y las últimas innovaciones son de ayuda tanto para prevenir como para mitigar este tipo de situaciones. La empresa Esri está especializada en la creación de mapas inteligentes, que ofrecen información detallada de la zona y facilitan el diseño de tareas de contención, prevención y mitigación de las inundaciones.
Estos mapas inteligentes también son útiles para comparar el territorio afectado antes y después de la inundación con el fin de saber las afecciones y los daños causados por el efecto de la riada.
Esri, que ha prestado sus servicios en anteriores riadas sucedidas en Aragón, emplea la solución tecnológica ArcGIS, que permite la captura, análisis, gestión e interpretación de los datos con un componente geográfico con el fin de poder ver relaciones y tendencias que son de ayuda para la toma de decisiones.
Con esta solución "se dispone de varias capas de información. El mapa tradicional se convierte en una herramienta, en mapas digitales e inteligentes que se complementan con fotos áreas, capturadas por drones o vía satélite", entre otras posibilidades, según ha explicado Aitor Calero, responsable de Tecnología e Innovación de Esri, a elEconomista.es
La información que contienen estos mapas inteligentes permiten modelizar. Por ejemplo, "se puede hacer un modelo virtual del relieve, ver cómo son los valles, ríos... y simular escenarios para, si sube el caudal del río, ver las zonas afectadas. Esto ayuda a la operativa y al mantenimiento". Además, se puede conocer el período de retorno de las inundaciones.
Una cartografía que ya posee la CHE (Confederación Hidrográfica del Ebro) por la toma de imágenes vía satélite que capturaron para determinar el área afectada en anteriores crecidas del río Ebro. "Estos riesgos previsibles con retorno están ya en un sistema de información", que se puede consultar para saber si se está o no en una zona de riesgo.
Los mapas inteligentes, por la información que contienen, son también de ayuda para las Unidades Militares de Emergencias y bomberos porque "ayuda a planificar las operaciones. Si no estuviera disponible esta información, la respuesta y la recuperación serían más difíciles. También los rescates serían más complicados". La información igualmente se puede emplear para realizar modelos predictivos.
En la actualidad, prácticamente todas las autonomías y confederaciones hidrográficas emplean esta solución tecnológica para analizar los avances de los ríos. "Damos las herramientas". Además, gracias a esta tecnología, las administraciones públicas también pueden poner a disposición de los ciudadanos herramientas de respuesta rápida para obtener datos útiles de la zona en la que residan.
Pero, a pesar de la existencia de esta tecnología -a la que cada vez se incorporan técnicas más avanzadas para tomar mejores medidas y simular escenarios-, todavía es necesaria una mayor apuesta en invertir en tecnología en modelos predictivos y mapas de riesgo, así como en renovar periódicamente la cartografía.