Gripple crece a un ritmo del 30% en España con sus sistemas de suspensión para instalaciones
Eva Sereno
La empresa prevé cerrar el año 2017 con una facturación de 1,7 millones de euros. La compañía, especializada en sistemas de suspensión y soportación para todo tipo de instalaciones, está registrando crecimientos del 30% desde que comenzase su actividad en España.
Gripple -que opera en España a través de una joint-venture formada por Araelec y la compañía inglesa-, está creciendo. Desde que se crease esta alianza empresarial, hacia el año 2010, se están registrando crecimientos de entre el 30% y el 35%.
La previsión es que la compañía facture alrededor de 1,7 millones de euros este año. Una facturación que seguirá creciendo y que se elevará a los 3 millones de euros en el año 2020.
Este crecimiento se asienta en la propia actividad de la compañía, ya que "es un producto que estamos introduciendo en el mercado y tiene un gran poder de crecimiento", según ha explicado Juan Ignacio Ara, director de Gripple.
De hecho, la introducción en el mercado de sus sistemas de suspensión para todo tipo de instalaciones es el pilar principal del plan de expansión de esta compañía, cuyo crecimiento también se pretende basar en la innovación. "Queremos intentar que el 30% de las ventas sea producto nuevo, innovación".
Además, también se adentrarán en otros sectores como la obra civil y el control erosivo de parques y jardines e, incluso, en soportes destinados específicamente al sector agrario.
La empresa, que tiene una estructura en España de diez personas, está inmersa en proyectos como el desarrollo de anclajes para el suelo con una nueva tecnología que se desarrolla en Gripple y que se implementará en Valencia.