Aragón

Los agricultores se manifiestan contra los precios bajos de la fruta


    Eva Sereno

    UAGA pide un cambio de actitud en la gran distribución y califica de incomprensible la inacción de la Comisión Europea a la hora de activar medidas suficientes.

    Los agricultores aragoneses se han sumando a la concentración que en Lérida, organizada por los sindicatos agrarios ASAJA, Unió de Pagesos y JARC-COAG, con el fin de hacer un frente común ante la situación que atraviesa el sector de la fruta dulce un año después del anuncio del veto ruso.

    En la concentración, que ha tenido lugar frente a un establecimiento de Lidl, los agricultores aragoneses han denunciado que la crisis de precios ha llegado a "un punto límite" en el que "resulta incomprensible y sin justificación la inacción de la Comisión Europea" al activar medidas efectivas para situaciones como ésta, previstas en la Organización Común de Mercados (OCM) de Frutas y Hortalizas, "que ha activado hoy pero sobre las que los agricultores consideran que son a todas luces insuficientes".

    Desde el sindicato agrario, han señalado que el mantenimiento de precios bajos, en una situación en la que no hay stocks, "sólo se explica por la presunta situación de abuso de posición de dominio que hace que los principales operadores de la gran distribución centroeuropea puedan condicionar el mercado con facilidad para así poder seguir manteniendo los márgenes de beneficio que consiguen, debido al hundimiento de precios desde inicios de campaña, agravado por el veto ruso".

    Una situación ante la que desde UAGA han reclamado un cambio de actitud en la gran distribución centroeuropea para que "detenga las prácticas comerciales que está llevando a cabo con la fruta dulce presionando los precios a la baja".

    Y es que desde la organización agraria han explicado que en algunos lineales de compra se está vendiendo fruta de hueso a 40 céntimos el kilo, cuando el coste de producirla se sitúa en torno a los 35, por lo que pretenden evitar que estas prácticas se acaben extendiendo también a la fruta de pepita.

    El sector de la fruta dulce emplea en Aragón a un total de 15.000 personas, empleos sobre los que ha indicado que se podrían perder en el caso de que no se tomen soluciones y no se actúe en relación a la actual crisis de precios.