Aragón

Martín Martín apuesta por el renting para favorecer el intraemprendimiento


    Eva Sereno
    Zaragoza,

    La cadena especializada en comida del ocio ha introducido la modalidad de renting para facilitar que los empleados puedan gestionar los establecimientos. Una opción que se suma a la franquicia bajo la que prevé crecer con nuevas aperturas en 2020, así como con tiendas propias.

    El renting se asocia a productos como los coches. Sin embargo, es una modalidad que también se está implantando en otros sectores de actividad. La empresa aragonesa Martín Martín ha optado por ella para que sus empleados puedan gestionar las tiendas. "El intraemprendedor choca con la financiación. Hemos establecido el renting para que los trabajadores que no disponen de los recursos financieros puedan explotar una tienda de su propiedad", explica José Antonio Domingo, director de Martín Martín.

    La empresa nació en 1983 vinculada al mundo de la aceituna y del aperitivo para evolucionar hacia la comida del ocio con soluciones para clientes de todas las edades y momentos del día. Unas propuestas que se articulan en torno a las aceitunas y encurtidos, salazones, conservas y aperitivos, frutos secos, snacks, bebidas frías, dulces y celebraciones, panadería y repostería y comida de conveniencia. En los últimos años, también se han introducido otras soluciones que la sociedad demanda como la comida lista para consumir, servicios de prensa y recargas de bus y móvil, así como zona cafetería y tapas o degustación y guardería para los más pequeños, aunque estos últimos espacios no están habilitados en todos los establecimientos y, de momento, no se contempla para nuevas aperturas. No obstante, no se descarta introducir más servicios, siguiendo el modelo de las tiendas de Japón.

    Y, dentro de la evolución del modelo de negocio, Martín Martín se abre a la modalidad de renting, que se basa en un acuerdo por el que el intraemprendedor hace frente "a una cuota que, luego, si se queda la tienda, se le descuenta de la inversión". El sistema, que ya se está utilizando con dos de sus empleados, tiene ventajas, ya que se conoce más a la persona que va a estar al frente de la tienda. "Es el modelo ideal, ya saben trabajar y de qué va esto. Ya sé si me gusta o no me gusta" la persona y su forma de trabajar. Un modelo en el que se sigue "un contrato que está claro desde el principio", al igual que las cuentas y las aportaciones que se realizan.

    La opción del renting se suma también a la posibilidad de franquiciar. Martín Martín tiene 85 establecimientos en España, de los que 67 son propios y 18 se operan bajo el sistema de franquicia. Con esta red de tiendas está presente en las comunidades de Aragón, Cataluña, Madrid, Navarra, País Vasco y Castilla y León.

    La franquicia -la primera en Zaragoza se abrió en 1995-es una de las vías de crecimiento de Martín Martín, que prevé abrir cinco nuevas tiendas (cuatro propias) en 2020. La expansión por franquicia se contempla en las zonas en las que Martín Martín tiene presencia. "Si no estoy yo, no voy como franquicia. Demuestro que soy rentable. Mientras yo no tenga la tienda y el mix de ventas, no puedo embarcar a nadie".

    Las zonas prioritarias de su expansión son Madrid -donde ya cuenta con cinco tiendas en Valdebernardo, Las Rosas, Clara del Rey, Alcalá de Henares o Tres Cantos-, así como Aragón, comunidad que es su core business. Los planes de la empresa contemplan aumentar la presencia en Zaragoza, donde se barajan tres nuevos emplazamientos sin que se produzcan cierres de tiendas ya abiertas, así como en Huesca, provincia en la que tiene cuatro tiendas en la capital, aparte de estar presente en las localidades de Sabiñánigo, Jaca, Barbastro y Fraga. Lérida es otra de las zonas en las que se está trabajando para nuevas aperturas.

    La elección del franquiciado, que no tiene que hacer frente a ningún canon de entrada ni royalty, se realiza a través de un proceso que comienza "trabajando tres meses con nosotros en los que se les contrata y realizan todas las tareas de la tienda". En este período, "se comprueba si nos gustamos". Además, es un tiempo en el que el candidato a la franquicia puede conocer a la gente, participar en las reuniones...

    "No es una franquicia de inversión, sino de autoempleo. Quiero tratar con la persona al frente del negocio que tiene que tener uniforme y horario. Y, ya cuando firme, tendrá dos ópticas: autoempleo y empleador", aunque siempre se está bajo el paraguas de la empresa. "Soy muy celoso de la imagen de la marca".

    Martín Martín, que desde 2018 se integró en el grupo Flamen&Co, se caracteriza por tener una relación directa con los franquiciados. "El éxito es que se entra a Martín Martín y no si la tienda es mía o franquiciada. Yo llevo las cuentas del franquiciado, se hacen reuniones... y la actividad comercial es la misma en todas las tiendas. La relación es empresario-empresario".

    Además, se facilita formación y apoyo en la selección del local (barrios o poblaciones de más de 10.000 habitantes) y en todas las campañas que realiza la empresa, se les suministra todo el producto (se encarga desde su elaboración en origen hasta que llega al consumidor final) y, en el caso de que se quiera dejar la franquicia, se la queda la cadena. Es decir, "se recompra. Esto facilita acceder a financiación". La rentabilidad sobre la inversión es alta. La empresa cerró el ejercicio de 2019 con una facturación de 28,18 millones de euros.

    En clave femenina

    Esta relación directa también se mantiene con la plantilla formada por 497 empleados, siendo más del 95% mujeres gracias a las medidas de conciliación de la vida laboral y familiar y siendo "flexible", algo que no siempre es fácil porque las tiendas tienen que estar abiertas y hay que "hacer encaje de bolillos" cuando se falta por cuidado de los familiares porque -aunque hay excepciones y la situación va cambiando poco a poco-, todavía son ellas las que faltan a trabajar para atender a los familiares enfermos. Además, se facilitan jornadas de trabajo de cuatro horas al día, fines de semana, personas mayores de 45 años...

    "El sector siempre ha sido más femenino en general. Antes había menos chicos pero por una falsa creencia de que no se admitían. Se van incorporando, aunque nuestra empresa es eminentemente femenina y me congratulo de ello porque, en general, las mujeres son mejores vendedoras y más cuidadosas para un modelo de negocio de cercanía al cliente, como el nuestro, en el que hay una interacción desde que se entra por la puerta. Cuidan el negocio como propio". Esta es precisamente una de las claves del éxito de Martín Martín -cuyas tiendas son como un puente en el que se une el pequeño comercio con la distribución moderna, pero sin perder "las virtudes" de una tienda tradicional-, al igual que la reciprocidad con el entorno a través del desarrollo de más de 200 actividades anuales en ámbitos como el deporte, familia, jóvenes, cultura o instituciones sin ánimo de lucro.