Andalucía

El Black Friday adelanta la campaña de compras navideñas en Andalucía

  • El 40% del comercio tradicional se suma a esta campaña de descuentos que no termina de convencer a la CECA.
Los andaluces han gastado más 200 euros de media en el Black Friday. Foto: Alex Zea.

Marta Ramos

El pasado viernes 23 de diciembre se celebraba el Black Friday, una campaña de descuentos importada de EEUU que ha llegado con fuerza a España y a la que también se suma Andalucía con rebajas que algunas ocasiones han durado varios días e incluso semanas.

Todos los sectores desde el comercio textil, hasta el de las nuevas tecnologías, los supermercados o incluso el mundo automovilístico han apostado estos días por ofrecer descuentos para incrementar sus ventas.

Una campaña en la que, según los datos de la compañía financiera Cetelem, los andaluces han gasto de media alrededor de 270 euros, un 0,5 por ciento más que en 2017, pero un 4 por ciento menos que el resto de españoles.

A pesar de que los importadores de esta campaña de rebajas fueron las grandes cadenas comerciales, el comercio tradicional andaluz comienza a sumarse a ella, aunque todavía con cierta reticencia, debido a la fuerte competencia de los grandes.

Este año alrededor de un 40 por ciento del comercio de proximidad ha apostado por ofrecer descuentos en estos días del Black Friday, unas cifras que se mantienen similares a las de la pasada campaña.

El porcentaje de descuentos en el pequeño comercio es notablemente más discreto del que ofrecen las grandes cadenas y no suele pasar del 30 por ciento.

"El Black Friday marca el inicio de la campaña de Navidad, viene a adelantar la iniciativa de compra, pero hemos detectado que no incrementa el total de las ventas", comenta a elEconomista Andalucía, Fernando Pérez, director gerente de la Confederación Empresarial del Comercio de Andalucía (CECA).

A pesar de que los andaluces han invertido dinero en esta jornada de ofertas, ese gasto no ha llegado al pequeño comercio. "La economía doméstica de la clase media aún está muy resentida, económicamente hablando y la capacidad de compra es muy limitada, lo que se gasta en el Black Friday no se gasta en Navidad y los descuentos hacen que las ganancias sean menos para las tiendas de proximidad", explica el representante de los comerciantes.

Aumento de la competencia

Una campaña, que a juicio de los empresarios del sector, contribuye a intensificar la dura competencia que suponen las grandes cadenas y recrudece la complicada situación que atraviesa el comercio de Andalucía, donde las tiendas tradicionales están siendo sustituidas por galerías de multinacionales.

"El Black Friday no es ninguna ventaja para el sector, estas campañas solo acostumbran al consumidor a comprar en un constante periodo de promociones, esto daña al maltrecho sector del comercio y viene para fastidiar la campaña de Navidad que es tradicionalmente la de ventas más fuertes", lamenta Pérez.

En cuanto a las ventas online, los comerciantes reconocen que aún no terminan de dar el salto al comercio electrónico, lo que según explican se debe a la complicado que resulta competir con las grandes.

"Es muy complicado, casi imposible, competir con las grandes marcas que ya están implantadas y se mueven con las ventajas de la internacionalización. El comercio tradicional debe basar su estrategia en las ventajas que ofrecen la proximidad, el conocimiento del cliente, la inmediatez a la hora de la obtención del producto y del asesoramiento personalizado", explica el director de CECA.

El Black Friday ha abierto la temporada de compras navideñas, para la que el comercio andaluz tiene unas previsiones bastante similares a las del año pasado, los empresarios prácticamente se conforman con mantener el volumen del pasado ejercicio tras varios años registrando importantes bajadas en las ventas.

Ante esta situación, el comercio tradicional sigue reclamando ayudas a las instituciones para poder mantener uno de los sectores más importantes de la economía andaluza.

"Este sector debe contar con una protección especial porque está desapareciendo y la solución no pasa por fomentar el las ventas online o ayudar a los grandes, pasa por establecer fórmulas que garanticen la estabilidad del comercio actual y de nuevos empresarios que fomenten este formato", advierte el portavoz de los comerciantes andaluces.