Andalucía

Unicaja Banco aprobará el miércoles la OPS para su salida a Bolsa antes de verano


    José Luis Losa

    La Junta de Accionistas de la entidad dará esta semana luz verde a una ampliación de capital por 625 millones, que le permitirá cumplir con la UE y mantener el control en manos de la Fundación

    n apenas seis meses ha cambiado completamente el panorama al que se enfrentaba Unicaja Banco y mañana mismo aprobará en Junta General de Accionistas su próxima salida a Bolsa en unas condiciones muy favorables para la firma malagueña, que es actualmente la octava entidad financiera española.

    El pasado otoño el Gobierno español, a través del Frob (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria), tuvo que pedir a la Comisión Europea una prórroga para la salida a Bolsa de Unicaja, a la que estaba obligada la entidad antes de que finalizara el año para devolver parte de las ayudas públicas recibidas por el absorbido Banco Ceiss (España-Duero). El mal momento de la situación económica mundial en 2016 -Brexit, victoria de Trump en Estados Unidos, ataques terroristas en Europa, entre otros- y el propio contexto de incertidumbre política en España -con un año de Gobierno interino- había complicado tanto la salida a Bolsa que realizarla de forma obligada y contrarreloj hubiera sido malvender su capital, ya que en ese momento el mercado castigaba con ferocidad los valores bancarios y algunas entidades apenas cotizaban a 0,3 veces su valor en libros.

    Nadie apostaba porque 2017 fuera a ser diferente, pero lo cierto es que el comportamiento de los mercados financieros ha variado completamente en el primer trimestre del año y el banco presidido por Manuel Azuaga ha adelantado sus planes para aprovechar este buen momento que incluye un crecimiento de la Bolsa superior al 10 por ciento. Tanto es así que el Consejo de Administración de Unicaja Banco aprobó el pasado 24 de marzo la convocatoria de la Junta General de Accionistas para el 26 de abril, y dar así el pistoletazo de salida a la operación, que podría llevarse a cabo inmediatamente, antes de verano, según varias fuentes consultadas por elEconomista, siguiendo el consejo del principal asesor de la entidad andaluza, Rothschild.

    Una de las claves es que se ha optado por una ampliación de capital (OPS) para su estreno, en lugar de una venta de acciones (OPV), porque esta operación le permite devolver su préstamo al Frob sin que la Fundación, dueña mayoritaria, se diluya por debajo 50 por ciento.

    El banco pertenece en un 86,7 por ciento a la Fundación Unicaja -presidida por Braulio Medel-, un 8,8 por ciento del capital se encuentra en manos de inversores institucionales como fondos de inversión o pensiones, y el 4,4 por ciento restante es propiedad de ahorradores particulares, antiguos tenedores de bonos convertibles contingentes (cocos) a los que Unicaja canjeó dichos títulos.

    El banco emitirá 625 millones de nuevas acciones -ampliables a 687 millones incluyendo el green shoe, el tramo para los colocadores-, y prevé captar, como mínimo, 625 millones de euros, aunque los más optimistas duplican esa cifra. Todo dependerá de cómo el mercado valore la operación, si como una oportunidad similar a lo que está ocurriendo en estos momentos con Bankia y la integración de BMN, o como un riesgo similar a la de entidades como Liberbank o Popular.Tras la OPS, la Fundación Unicaja seguirá controlando el 52 por ciento, o el 50 por ciento si se ejerce el green shoe. La transacción supone ampliar el capital en algo más del 40 por ciento y se instrumentará con la emisión de nuevas acciones que se colocarán entre inversores cualificados nacionales e internacionales, no entre minoristas.En relación con las cuentas del ejercicio 2016 de Unicaja Banco, el Grupo malagueño alcanzó un nivel elevado de beneficios en este período, en el que reforzó su solvencia, continuó la reducción de morosidad preservando los altos niveles de cobertura y registró un incremento significativo en las nuevas operaciones de crédito, manteniendo un alto nivel de liquidez y mejorando la eficiencia.El Grupo Unicaja Banco obtuvo al cierre de ejercicio 2016 un beneficio atribuido de 142,1 millones de euros, según informó la entidad el mes pasado, que, sin tener en cuenta las provisiones adicionales relativas al posible impacto que podría derivarse de las cláusulas suelo (130 millones), se habría situado en la cifra de 233 millones, lo que habría supuesto un incremento del 24,9 por ciento en el resultado atribuido al Grupo.Asimismo, en este período, destacó el reforzamiento de los niveles de solvencia con un aumento hasta el 13,8 por ciento de la ratio CET1, la reducción continuada de los riesgos dudosos hasta el 9,8 por ciento, el mantenimiento de altos niveles de cobertura crediticia (50,0 por ciento) y de activos adjudicados (62,1 por ciento), que figuran entre los más elevados del sector, y el incremento en las nuevas operaciones de crédito, hasta un importe de 3.613 millones de euros -con un crecimiento interanual del 34 por ciento en pymes-; todo ello sin afectar al alto nivel de liquidez.