Con las subidas del petróleo y del euro castigando las cuentas de resultados de las compañías -mayores costes, menos exportaciones y efecto divisa adverso- sólo faltaba que Wall Street pusiera la guinda. Y así ha sido, ya que los índices estadounidenses abrieron mal y siguieron empeorando según avanzaban los minutos hasta registrar a estas horas descensos de un punto porcentual en el mejor de los casos, el del S&P 500. Así, y tras un comienzo plano, el Ibex no ha tenido opciones y ha terminado perdiendo un 1,81 por ciento colocándose en 11.165, 60 puntos. Arcelor, Iberia y TPI, han logrado no ceder terreno con un cierre plano mientras que Sacyr y Repsol se han llvado la peor parte con bajadas del 4,25 y del 2,86 por ciento, respectivamente. ¿Miedo al BCE tras la M3 de abril?