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Los ricos viven más y mejor


    María Sempere

    Siempre se ha dicho que los ricos viven más y mejor. Pero, esta afirmación, ahora parece estar probada y avalada por un estudio científico. Sin duda, tener acceso a tratamientos de última generación y poder pagar las cremas más lujosas del mundo facilita muchísimo las cosas.

    Llevar a cabo una vida repleta de lujos podría estar relacionado con la menor prevalencia a sufrir patologías relacionadas con la edad. Esto es lo que dice el último estudio realizado por el Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos. Según los datos aportados por los científicos que firman el ensayo, los estilos de vida de lujo favorecen una vida más larga y saludable.

    El estudio asegura que la sordera, la diabetes o los infartos de miocardio se ven muy reducidos en aquellas personas que cuentan con una renta mayor. Es decir, lo que ganamos estaría directamente relacionado con nuestra salud y la aparición de enfermedades en los adultos.

    La explicación que ofrecen los responsables de la investigación ante estos datos es sencilla. Dicen que las personas con mayor poder adquisitivo realizan mucha más actividad física, y en mejores condiciones, ya que tienen acceso a pruebas de salud que están lejos de poder ser pagadas por el común de la población. Además, son más propensos a comprar todo tipo de productos de lujo, que prometen satisfacer las necesidades antiedad.

    Productos ideales para un nivel de vida de lujo

    Por algo más de 1.800 euros es posible adquirir una bicicleta estática, de spinning, conocida como Peloton Cycle. Esta bici incorpora en la zona delantera una tableta de gran tamaño, que reproduce las clases de spinning del gimnasio o las planteadas por la propia marca. De esta forma es más sencillo acceder a la actividad física, ya que no es necesario acoplarse al horario establecido.

    Otra opción para satisfacer una vida de lujos extremos es ser el propietario de una de las cremas antiaging más caras del planeta. Se trata del serum JK7 Rejuvenating. Un pequeño frasco, con 30 ml de este elixir de juventud cuesta casi 1.700 euros. Los ingredientes de este serum se mezclan de forma artesanal en Hawái y han sido probados durante más de 10 años, hasta que han logrado dar con la formulación perfecta.

    FitnessGenes, por su parte, es una empresa especializada en realizar un completo barrido por el genoma de sus pacientes para averiguar qué es lo que el cuerpo de cada persona le depara a nivel deportivo en el futuro.