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Mucho cuidado con colgar la toalla en el balcón después de la piscina: algunas comunidades de vecinos lo prohíben en sus estatutos

Colgar la toalla del balcón podría estar prohibido por los estatutos. / Foto: iStock.

elEconomista.es

Colgar la toalla en el balcón al subir de la playa o de la piscina es probablemente uno de los gestos más comunes del verano, sin embargo, parece que este aparente inofensivo gesto podría estar prohibido, tanto por los estatutos de la comunidad, como por las normativas municipales. El debate se ha desatado en redes cuando una joven creadora de contenido denunciaba que su comunidad de vecinos le ha alertado de que no puede tender en el balcón su toalla al subir de la piscina, porque "se ve poco estético".

Así pues, los estatutos de las comunidades pueden prohibir esta práctica, tanto por motivos estéticos (como es el ejemplo de esta chica), como por motivos de seguridad (por ejemplo, evitar que caiga al suelo o que gotee), paisajísticos o históricos. Además, según recoge el artículo 17 de la Ley de Propiedad Horizontal, en caso de no estar esto regulado, se puede incluir en los estatutos si cuenta con el apoyo necesario.

Al igual que sucede con los colores de los toldos o los aparatos del aire acondicionado, todo dependerá de lo que diga la comunidad, por lo que si somos nuevos, como sucede en el caso de la joven creadora de contenido, lo más recomendable es consultar los estatutos, para evitar encontronazos con algunos vecinos.

También hay normativas municipales

Paralelamente, esta práctica también está regulada por la normativa de algunos ayuntamientos, al igual que sucede con cualquier otra ropa que sobresalga de la fachada, como es el caso de lugares como Madrid, Barcelona o Valencia.

Sorprende, ya que es muy común ver en zonas, especialmente de playa, multitud de toallas colgadas en las barandillas o cristales del balcón, sin embargo, se trata de una práctica prohibida, al igual que pasa con las banderas, también muy comunes en las ciudades mencionadas.

En el caso de incumplir estas normativas municipales se pueden llegar a aplicar sanciones económicas superiores a los 700 euros, por lo que se recomienda consultar además de los estatutos comunitarios, las normativas municipales relativas a este tema.

Por lo tanto, a pesar del enfado de la joven, que cuestionaba "¿quién creéis que tiene razón?", la realidad es que es muy probable que en su comunidad esta práctica este prohibida por los estatutos, y que, por tanto, deba colgar su toalla en otro punto donde sí esté permitido.