Cómo eliminar el hielo del congelador en verano usando solo papel aluminio

Llegar cansado del trabajo tras un día de verano, abrir el congelador para sacar un tupper de comida de tus padres y, por desgracia, descubrir que se encuentra hasta arriba de hielo. A todos nos ha pasado. Y es una fatídica noticia para nuestros intereses, tanto a corto como a largo plazo.

Explicación

De hecho, no solo es algo molesto, sino que puede afectar también al rendimiento de nuestro electrodoméstico. ¿Y por qué se forma? Pues bien, hay varias razones por las que el congelador crea hielo y supone un verdadero problema para los que viven en el hogar:

• La humedad formada en el congelador se acaba condensando cuando se enfría.
• El sistema de ventilación funciona de manera incorrecta, por lo que permite que la humedad se convierta en un bloque de hielo.
• El frigorífico se ha cerrado mal y ha dejado entrar el aire del exterior. El cual, al mezclarse con el frío, ha formado una condensación que ha acabado en hielo.

Alternativa eficaz

Por suerte, existe un truco que permite eliminar el hielo -sin necesidad de desenchufar el aparato ni retirar los alimentos- que se ha viralizado en las últimas semanas de cara al periodo veraniego (julio y agosto, principalmente). Tan solo necesitamos una linterna y un rollo de papel de aluminio.

En primer lugar, hay que cortar hojas de papel de aluminio bastante grandes para forrar las paredes del congelador. Eso sí, hay que asegurarse de cubrir todo el hielo acumulado, por lo que hay que presionar para que se adhiera correctamente y no se despegue de ninguna forma.

A continuación, debemos dirigir la luz de la linterna hacia el papel. Esto hará que el aluminio actúe como un conductor de calor. En caso de no querer usar una linterna, podemos dejar el papel de aluminio en las paredes durante aproximadamente 20 minutos.

Tras este corto periodo de tiempo, el hielo se desprenderá con facilidad. Es decir, se trata de un procedimiento muy sencillo, rápido y que no requiere grandes cantidades de dinero. Es más, evitando la acumulación excesiva de hielo se optimizará su consumo de energía. ¿Te atreves a ponerlo en práctica?