Cómo cultivar fresas en interiores para tener frutas deliciosas todo el año
- El cardiólogo Aurelio Rojas (Universidad de Málaga): "El kiwi, las fresas, la granada y los arándanos aumentan la oxidación de grasas"
- Una hoja de laurel detrás de la puerta: el truco sencillo con el que terminarás con el gran problema para el próximo verano
- Cómo cuidar las plantas de interior: si las puntas de las hojas están marrones, es por este problema concreto
Gloria Martínez
La fresa es una de las frutas más sabrosas, y su gran versatilidad permite incluirlas en numerosas recetas. Disfrutar de este alimento fresco es una oportunidad que no todo el mundo puede tener, pero deberías saber que es posible cultivarlas en tu propia casa, sin necesidad de ayuda y siguiendo unos sencillos consejos y pasos.
La temperatura
Uno de los elementos fundamentales que debes tener en cuenta a la hora de cultivar fresas en el interior es la temperatura. Siempre y cuando esta se mantenga estable, es decir, ni demasiado fría ni demasiado caliente, las fresas prosperarán a una temperatura ambiente de 21 grados aproximadamente.
Iluminación
Cuando plantamos esta fruta en el exterior como el jardín o un huerto, obtienen directamente la luz del sol, pero al hacerlo dentro de casa la cosa cambia. Las fresas necesitan mucha luz para sobrevivir por lo que es fundamental colocarlas en una ubicación cercana a una ventana o lo más orientada al sur posible para que obtengan todas las horas de iluminación que necesitan, que es entre 12 y 14 al día.
El agua
Como toda planta, las fresas también necesitan agua para crecer de forma sana y natural. No obstante, no requieren la misma cantidad si se encuentran en una superficie en el exterior que dentro de una maceta en el interior. En el segundo caso, el flujo de aire es más débil y corre el riesgo de aparecer moho que perjudica a nuestra planta. Es importante controlar la humedad del suelo y ajustar un programa de riego.
El suelo
Como ya se ha mencionado anteriormente, el tipo de suelo es parte fundamental del cuidado de las fresas. Estas pueden ser muy exigentes con la superficie en la que crecen, pero son perfectas para ser cultivadas en grandes macetas o contenedores donde es posible controlar el crecimiento y la extensión que realizan por el interior. Debes contar con un suelo drenado, que no sea nada pesado y ligeramente blando para favorecer su libre movimiento.
La polinización
Ya tenemos todos los elementos necesarios para un correcto crecimiento de nuestra fresa en casa, pero falta una parte muy importante, los polinizadores. Al tratarse de una planta que crece en un espacio cerrado, no contará con la presencia de los insectos encargados del proceso de polinizar, por lo que la fresa no tendrá la posibilidad de esparcir el polen de una flor a otra de manera natural.
Si quieres que florezca el fruto deberás coger un pincel y extender el polen manualmente desde los estambres hasta el centro de la flor. Basta con esperar a que crezcan y podrás disfrutar de tus fresas completamente cultivadas en casa.