La planta que debes tener para llenar tu casa de flores en primavera sin tener ni idea de jardinería

¿A quién no le gusta sorprender a sus invitados con una o varias plantas en flor durante los meses de primavera? Esto puede parecer una tarea complicada, sobre todo, si se eligen especies o variedades que requieran muchos cuidados y, concretamente, si no se tiene mucha idea de jardinería. Sin embargo, hay algunas plantas perfectas para conseguir floración, una buena decoración natural y mucho color en el interior del hogar sin apenas cuidados específicos.

Un muy buen ejemplo de ello es la begonia, una planta ornamental que es muy reconocible por sus bonitas flores, así como por el verde de sus hojas, que hacen una combinación perfecta para el interior del hogar. De hecho, también se puede colocar en las zonas exteriores, como en el jardín, el patio o el balcón.

Rojo, rosa, blanco, naranja o amarillo son algunos de los colores que pueden presentar sus flores, que, además, pueden ser dobles, al mismo tiempo que las hojas pueden tener diferentes formas y tamaños, dependiendo de la variedad.

Mientras que algunas de las variedades pueden florecer durante todo el año, hay algunas que consiguen su momento álgido durante los meses de primavera y verano, al mismo tiempo que unas son de hoja perenne y, otras, pueden ser anuales.

Teniendo en cuenta la gran versatilidad y las muchas variedades que hay, se puede concretar que, la mayoría de ellas, son muy agradecidas: con pocos cuidados, se puede tener un ejemplar de begonia en casa, floreciente y creciendo correctamente, por lo que no requiere de mucha atención. Bastará con seguir algunos consejos y cuidados básicos, muy sencillos.

Luz: ¿Dónde colocar la begonia?

El primer de los cuidados fundamentales de la begonia pasa por la luz, por lo que es importante elegir bien dónde colocar esta planta, tanto dentro como fuera del hogar. Como pasa con otras plantas de interior, la begonia necesita mucha luz solar, pero siempre de forma indirecta, ya que la luz solar directa podría quemar sus hojas y sus flores.

Así, busca una habitación luminosa, donde entre la luz solar, pero coloca la planta en un lugar en el que los rayos de sol no incidan directamente en ella. Si es en el exterior, un balcón o un jardín en el que dé el sol es una buena opción, pero trata de poner la begonia en un lugar donde se tape parcialmente de la incidencia directa, por ejemplo, al lado de un árbol, arbusto u otras plantas que hagan de parapeto.

¿Cada cuánto regar una begonia?

Por otro lado, como sucede con otras plantas, el riego es un factor clave y fundamental. En este caso, la begonia necesita mucha cantidad de agua, pero esto no significa que haya que encharcar la planta. Habrá que tener cuidado con el exceso de agua, ya que esto puede ser letal para sus raíces y, por tanto, para la propia planta.

En concreto, se recomienda regar la begonia una vez a la semana durante los meses de invierno y, durante el verano, una vez cada tres o cuatro días, como máximo. Como recomendación extra, es mejor contar con un sustrato que acumule y mantenga la humedad en la planta, de tal modo que no haya que estar regando la planta constantemente y evitando así los encharcamientos.

Eso sí, no eches el agua directamente en la maceta con una regadera, ya que es mucho más recomendable para evitar este mismo problema poner un plato de agua bajo la maceta, de forma que la tierra y la planta vayan absorbiendo gradualmente el agua.

¿Qué temperaturas aguanta la begonia?

Aunque en las plantas de interior la temperatura no suele ser un factor clave, ya que los grados se mantienen fácilmente tanto en verano como en invierno, en la begonia sí que hay que tener en cuenta una serie de recomendaciones, sobre todo, porque también puede ponerse en el exterior.

Ya sea en el interior como en el exterior de la casa, hay que evitar el frío a toda costa, tanto las heladas que puedan darse de forma natural en el exterior como las corrientes de aire frío que puedan entrar en el hogar. Necesitan un clima cálido para poder desarrollarse correctamente, por lo que habrá que mantenerlas entre los 15 y los 24ºC.

Abono y poda de la begonia

Los dos últimos cuidados pasan por abonar las begonias con un fertilizante especializado para plantas con flor, que deberá echarse cada dos o tres semanas durante la época de floración que, como hemos dicho, es entre la primavera y el verano.

Por último, la poda es fundamental, pero es muy sencilla: solamente es necesario eliminar las hojas y las flores que se hayan secado o tengan mal aspecto. Con ello, ayudaremos al resto de la planta a crecer correctamente y, también, a que se produzca la floración.