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Mikel Jauregi, consejero de Industria Gobierno Vasco: "La industria recibirá más de 500 millones para su transformación energética y digital"
- "A pesar del contexto internacional prevemos estabilidad en nuestra economía"
- "Euskadi es atractiva para inversiones industriales y tecnológicas"
Maite Martínez
Bilbao,
Con el objetivo de asegurar el tejido industrial vasco para que siga siendo el motor de la economía y del bienestar de toda la sociedad, el departamento de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad del Gobierno autonómico, destinará más de 500 millones de euros para avanzar en su transformación energética y digital, y mejorar su productividad y competitividad.
Según detalla, el consejero, Mikel Jauregi, por un lado, la industria contará con dos programas de ayudas para la descarbonización de los procesos productivos y la integración de autoconsumo, que suman 260 millones, "lo que supone una inversión récord". Además, "vamos a invertir 289 millones en I+D+i y en la transformación digital, para mejorar nuestra industria y apostar por la innovación y tecnología como palancas de productividad y competitividad", explica el consejero vasco.
"Queremos transformar nuestra industria desde el punto de vista energético, y aprovechar las oportunidades que genera esa transformación para crear y atraer nueva industria", asegura Mikel Jauregi. A su juicio, Euskadi es un destino atractivo para inversiones industriales y tecnológicas por su entorno innovador y colaborativo.
Diferentes estudios prevén un gran crecimiento económico en Euskadi para 2025, gracias a la recuperación de la demanda europea. ¿Comparte estas perspectivas?
En el Gobierno Vasco revisamos en octubre la previsión y se sitúa en un crecimiento del 2,1% frente al 1,8% anterior. A pesar de las incertidumbres internacionales, como la política arancelaria de Estados Unidos o la guerra comercial con China, prevemos estabilidad en nuestra economía. Las estimaciones financieras auguran un rango de crecimiento entre el 1,8% y el 2,8%. Nuestra previsión del 2,1% está dentro de esa horquilla y nuestro deseo es estar cerca de las mejores previsiones.
¿Qué cifras de exportaciones vascas manejan para el cierre de 2024?
Euskadi es una de las economías más abiertas de Europa y nuestras exportaciones suponen más del 35% del PIB en los últimos años, por lo que la economía es sensible a la evolución global, y, especialmente, a la de las economías europeas a las que se dirigen más del 60% de las exportaciones, Francia y Alemania. Aun así, acabaremos 2024 cerca del récord histórico de exportaciones de 2023, con una proyección de alcanzar los 31.570 millones. Supone un resultado positivo en el contexto de ralentización económica y el retroceso de las exportaciones de automoción, junto a la caída del consumo en Alemania. Habla a las claras de la fortaleza de nuestra economía.
Euskadi necesita avanzar en producción renovable. ¿Tras el acuerdo con EH Bildu para el despliegue se impulsará este objetivo?
Tenemos el 7,3% de producción propia de energías renovables sobre la demanda eléctrica vasca, y el 32% es lo que en 2030 tendrán que representar las renovables en el consumo final de energía. Es decir, a la producción de renovables propia se le suma la electricidad importada que tendrá carácter renovable. En 2023 la participación de las renovables en el consumo final ha sido del 20,3%. El salto que toca hasta 2030 es de 12 puntos, objetivo que tenemos para llegar a 2050 con una economía descarbonizada.
¿Cómo se piensa alcanzar ese objetivo?
Debemos potenciar las medidas de eficiencia energética en nuestra industria, ya que la mejor energía es la que no se consume, y vamos a hacer una inversión récord para potenciar el autoconsumo. Y, por supuesto, apostamos por el desarrollo de parques fotovoltaicos y eólicos para acercarnos a la media europea de generación eléctrica renovable. Euskadi necesita las energías renovables y nuestra industria y sociedad también. Y para ello, todos los agentes económicos y sociales debemos tener un debate sereno para proponer soluciones equilibradas con una implementación ordenada.
¿Definirán un modelo propio de transición energética que permita mantener el modelo económico con el peso de la industria?
Somos un país eminentemente industrial. Esta es la fórmula que tenemos en Euskadi y estamos convencidos de que la industria es la solución al cambio de paradigma que se está viviendo en Europa. El informe de Mario Draghi nos recuerda que los europeos estamos perdiendo terreno con los competidores chinos en el ámbito de la tecnología y excelencia manufacturera en sectores tradicionales, y con Estados Unidos, en Inteligencia Artificial. Esto supone que Europa únicamente tiene un camino para salir fortalecida y es su reindustrialización. Apostamos por que Euskadi sea protagonista de la reindustrialización de Europa, porque debemos y podemos.
¿Cuáles son las fortalezas de Euskadi?
Nuestra industria supone el 24% del PIB. Apostamos por la innovación y tecnología con una inversión del I+D que llega al 2,16%. Nuestra excelencia en fabricación es reconocida mundialmente, y somos defensores de la colaboración público-privada. Debemos asegurar nuestro tejido industrial para que siga siendo el motor de nuestra economía. Por eso queremos transformarla desde el punto de vista energético, y aprovechar las oportunidades que genera para crear y atraer nueva industria.
¿Qué ayudas va a recibir el tejido industrial para reducir emisiones?
En los próximos cuatro años vamos a poner a disposición de la industria vasca dos programas de ayudas para la mejora de la descarbonización de los procesos productivos y la integración de instalaciones de autoconsumo, con unos presupuestos de 100 millones y 160 millones, respectivamente, que suponen una inversión récord.
¿Y en tecnología y transformación digital?
Euskadi es un destino atractivo para inversiones industriales y tecnológicas que busquen un entorno innovador y colaborativo. A este respecto, vamos a invertir 289 millones en I+D+i y en la transformación digital, con ayudas a la industria digital, la inteligencia artificial, las tecnologías cuánticas, la ciberseguridad o la 'smart industry.' Esta es una muestra de la apuesta por la innovación y tecnología como palancas de productividad y competitividad.