Un bar gallego adelanta su cierre por vacaciones harto por la llegada de madrileños que consumen poco
- El bar Puerto Martina de Mera (Oleiros), A Coruña, se queja de las exigencias gratuitas de los turistas al pedir agua y pinchos.
Ruth Lodeiro
Galicia,
El hecho de que Galicia sea la comunidad con más bares por metro cuadrado de España, sorprende la decisión del propietario de un local ubicado en Mera (Oleiros) A Coruña al adelantar el cierre del establecimiento por vacaciones al 12 de este mes al estar saturados de los turistas madrileños. Algo inaudito hasta el momento en un lugar donde la cultura del tapeo y del vino forma parte del adn gallego.
La hartura es tal que los empelado llegan a pronunciar que "si cae una bomba quedan sin tontos en la meseta". De esta forma, María, la responsable del bar Puerto Martina ha anunciado el cierre temporal del establecimiento del 12 al 19 de agosto.
Esta decisión, comunicada a través de redes sociales, busca evitar la avalancha de turistas esperada durante el puente del 15 de agosto y adelantar las vacaciones del personal, inicialmente previstas para septiembre. Según María, "este turismo que estamos recibiendo no nos enriquece, nos empobrece", criticó.
La proliferación de un tipo de turismo que contamina y muchas veces incompatibiliza con las normas de convivencia del lugar ha derivado en la creación de términos como 'fodechinchos' para describir a los madrileños a raíz del aumento del turismo costero en la comunidad. Sin embargo, el problema específico de Puerto Martina no es la masificación, sino la poca capacidad de consumo y la actitud problemática de los turistas.
La no correpondencia de la oferta del local con el retorno económico lleva a sus gestores del bar a argumentar que la saturación de turistas supone un desgaste físico y mental para el equipo. En sus redes sociales, el bar publicó un mensaje contundente: "Ante la inminente llegada del puente del 15 de agosto, donde si cae una bomba en Mera quedan sin tontos en la meseta, hemos decidido cerrar Puerto Martina Bar entre las fechas 12 y 19 de agosto", refiriéndose principalmente a los turistas provenientes de Madrid.
Un antes y un después
Se quejan desde el local que los visitantes de la capital y provincia exigen servicios gratuitos como pinchos y agua, y, en algunos casos, incluso insultan al personal. Estas actitudes se suman a la "altivez, exigencias, peticiones que no son normales, mala educación y de vez en cuando un insulto xenófobo al personal que no es español", critican.
Desde la perspectiva de María, antes los turistas madrileños poseían un mayor poder adquisitivo y eran buenos clientes, pero con el paso del tiempo, sus descendientes tienen menos recursos económicos y mantienen la tradición de veranear en Mera sin contribuir significativamente a la economía local.