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Todo sobre los radiadores de calor azul: mitos y verdades sobre su gasto y eficiencia

  • Estos radiadores siguen siendo un radiador eléctrico
  • Ofrecen bastante ventajas frente a otros sistemas e calefacción
Alamy//Radiador de calor azul

elEconomista.es

Con la llegada del frío y el precio de las facturas que no deja de crecer, son muchos los que salen en busca de un nuevo sistema de calefacción que sea económico y que sea efectivo a la hora de calentar el hogar. Los avances tecnológicos han conseguido ofrecer diferentes productos que aspiran a ser la revolución térmica, y en el artículo de hoy nos centraremos en uno de ellos, en concreto los radiadores de calor azul.

El calor azul es un sistema de calefacción por fluido térmico cuya característica principal es la optimización de recursos, por lo tanto los radiadores son el aparato que albergan este tipo de energia. Para entenderlo mejor, estos radiadores siguen el mismo principio que, por ejemplo, un secador de pelo, ya que ambos aprovechan el efecto Joule.

Este efecto consiste en la transformación de la energía cinética, en este caso la corriente eléctrica que al recibir una resistencia se transforma en calor. Esto quiere decir, que este tipo de radiador es un aparato eléctrico.

Pero esto no es lo único que hace especial a este producto, ya que dentro de estos radiadores hay un fluido llamado Sol que es capaz de irradiar calor a lo largo de este aparato. Sol es un excelente conductor térmico y no pierde calor, por lo que una vez apagado, estos radiadores mantienen la temperatura y el calor muy bien.

¿Son más baratos que otros radiadores?

Como decíamos antes, los radiadores de color azul son un tipo de radiador eléctrico, por lo que su consumo y gasto es prácticamente el mismo que cualquier otro radiador eléctrico, y es que a pesar de que su eficiencia puede ser mayor, el rendimiento es prácticamente el mismo.

Y si bien la relación entre la energía consumida y el calor generado deja en muy buen lugar a este aparato, si lo comparamos con otros como las bombas de calor, este se queda bastante atrás. Aun así, este tipo de radiador cuenta con varios beneficios para aquellos que lo usan, por ejemplo, su instalación es muy sencilla ya que solo tienes que enchufarlo para que funcione.

A su vez, son dispositivos seguros ya que son eléctricos, y por ese mismo motivo no generar olores ni generan ruido, lo que los hace ideal para un hogar, sobre todo uno con niños o mascotas. También se les conoce por ser rápidos a la hora de calentar una habitación y versátiles, ya que los puedes mover de un lado a otro sin problema.

Por último, y a pesar de que puede que no sean la opción más barata, puedes controlar tú mismo el consumo al ser programables y regulables.