El Supremo da la razón a Florentino Pérez que blinda su marca Real Madrid
María Juárez
El Real Madrid sale victorioso y blinda su marca. El Tribunal Supremo ha dado la razón al presidente del club, Florentino Pérez, y no permite el registro al Madrid Club de Fútbol Femenino (Madrid CFF), equipo de la Liga F, con ese nombre. La resolución del 7 de noviembre dicta que el equipo femenino se está aprovechando de la reputación y de la imagen del equipo blanco, a pesar de que dicho equipo femenino se remonta a 2010.
"No cabe duda de que la marca Real Madrid o Madrid en el ámbito de los clubes deportivos o para la actividad deportiva en general y en especial para el fútbol y baloncesto goza de un renombre internacional muy arraigado", explica el auto del Supremo. Además, agrega que "el escudo y disposición de las letras CFF dentro del mismo rememoran el escudo del Madrid", lo que es suficiente para que la gente relacione ambos clubes.
Nombre similares, equipaciones similares y ambos con sede en Madrid. Una choque de intereses no solo dentro del campo, sino también fuera. El caso se originó en 2020, cuando el Real Madrid lanzó su sección femenina y cuando la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) denegó la solicitud del Madrid Club de Fútbol Femenino para inscribir la marca "Madrid CFF".
A raíz de la resolución, el Madrid CFF podría llegar a cambiar su nombre al no poder registrar la marca. No obstante, a priori, si que podría seguir manteniendo el nombre Madrid Club de Fútbol Femenino.
Otros conflictos en los juzgados
El pasado jueves, la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional desestimaba el recurso de apelación formulado por el Real Madrid, contra el auto del 13 de septiembrede este año. En definitiva, se desestimaba la querella interpuesta por el club blanco frente a Javier Tebas, presidente de la competición, y LaLiga por los delitos de administración desleal; apropiación indebida; delito societario de imposición de acuerdos y un delito de corrupción en los negocios.
En dicho Auto se razonaba y fundamentaba que los hechos contenidos en la querella claramente no constituían delito alguno, a la vez que calificaba la descripción de hechos efectuada por el Club de "versión conspirativa contra sus intereses por parte de la Liga Nacional de Fútbol Profesional y su presidente".