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Las expectativas de los universitarios sobre su futuro laboral: ¿Optimismo o pesimismo?
- La prioridad para su primer trabajo no es el salario ni el crecimiento laboral
- También valoran enormemente el equilibrio entre trabajo y vida personal
- Workman aplaude la capacidad de los 'Z' para adaptarse a los tiempos actuales
Iago Eguileta
Madrid,
Como cada año, las graduaciones y fiestas que suceden a las carreras universitarias comienzan a vislumbrarse en el horizonte. La llamada 'Generación Z' (término generalmente aceptado como la franja poblacional que va desde los nacidos a mediados de los noventa hasta los nacidos a mediados de los 2000) pasa actualmente por esta etapa, y los que todavía son estudiantes afirman buscar algo en particular para sus primeros trabajos: estabilidad.
Los jóvenes que se gradúan en el curso 2022/2023 han pasado una buena parte de sus años universitarios bajo el yugo del coronavirus. Ello les ha obligado a ser más flexibles y resistentes ante las adversidades, pero también propicia que anhelen la normalidad más que otros graduados previos. Por ejemplo, según un estudio de la web profesional para estudiantes y recién licenciados Handshake, el 85% de los 'Z' asegura priorizar un proceso de búsqueda y obtención de empleo estable sobre todo lo demás.
Otras grandes prioridades
Por su parte, el 81% reivindica la importancia de los beneficios laborales, y el 80% comenta que un buen salario de partida también es crucial debido a la motivación que puede causar en el trabajador.
Y es que los más jóvenes que acceden actualmente al mercado laboral se encuentran con una situación complicada de definir, especialmente en algunos países como Estados Unidos, donde las noticias siguen inundadas de temas sobre despidos, mientras que la tasa de desempleo es de las más bajas de la historia del país. Además, las ya prolongadas advertencias sobre una recesión que todavía no ha hecho acto de presencia siguen aportando incertidumbre al cóctel que actualmente conforma dicho mercado laboral.
Pero la directora legal de Handshake, Valerie Workman, afirma por su parte que varios indicadores económicos animan a los casi graduados y les hacen sentirse confiados. Son por ejemplo las distintas informaciones sobre escalas salariales que son actualmente públicas.
El por qué de la confianza de los jóvenes
A pesar de los últimos datos arrojados por Handshake, una investigación previa mostraba una doble realidad: si bien quienes están a punto de graduarse se sentían optimistas con respecto a sus expectativas en el largo plazo, la situación era muy distinta en el corto plazo, y esa perspectiva más sombría hacía que muchos sintiesen ansiedad.
Por ejemplo, Ben Telerski es un joven de 22 años que estudia en la Universidad de Georgetown. Este ve su futuro profesional dentro de la política, y aunque ya prueba a optar a puestos laborales en sus ratos libres, cuando no estudia ni está en sus prácticas, afirma sentirse estresado con la situación.
Pero cuando mira más hacia delante en el tiempo, comenta que: "Me siento genuinamente optimista, y estoy muy entusiasmado por acceder al mundo real y ver cómo son las cosas". Y con respecto a factores que esta generación lleva tiempo asimilando como parte de su realidad (Covid, Cambio Climático, Tiroteos...) explica que la mentalidad propia de los de su quinta es: "Vale, lánzanoslo, y haremos algo con ello".
Otro elemento de gran importancia
Pero Telerski, como otros muchos jóvenes, no solo está entusiasmado por conseguir un trabajo que le apasione y nada más terminar la Universidad. Y es que para él es crucial poder equilibrar su vida profesional con la personal. En su caso, a corto plazo vislumbra que será compaginar un trabajo de baja remuneración, con actividades no remuneradas tales como trabajos comunitarios.
Y una vez más, a pesar de los titulares en la prensa estadounidense que invitan al pesimismo, Workman afirma que existe una gran variedad de ventajas para la mayoría de trabajadores, con decenas de millones de oportunidades nuevas en el mercado laboral. Esto, sin embargo, plantea otro dilema: no se trata de encontrar trabajo, sino de encontrar aquel trabajo que sea adecuado para uno y que le mantenga motivado y con ganas de mejorar.
Además, añade que la idea de que los más jóvenes se centran en ir de trabajo en trabajo para avanzar profesionalmente es un mito: "A esta generación le preocupa el trabajo que realiza, y quieren estar en lugares en los que se aprecie su talento, así como aquellos en los que puedan permanecer", argumenta la misma.
Una predisposición importante
Pero los jóvenes cuentan con más información que cualquier otra generación anterior para dirigir sus trayectorias profesionales. "Saben que el salario importa en términos de conseguir el estilo de vida que anhelan. Quieren vivir por su cuenta y poder apoyarse a sí mismos. No quieren verse dentro de un trabajo en el que no se satisfacen sus necesidades, tanto profesionales como financieras", argumenta Workman.
Melina Ressler es una joven de 21 años que quiere comenzar a trabajar en Relaciones Públicas en la ciudad de Los Ángeles. Comenta que ya sabe qué salario esperarse para su primer empleo, basándose en conversaciones con exalumnos y con amigos, y puntualizando que para ella TikTok supone una excelente fuente de consejos sobre negociación y búsqueda de empleo. Cuando comprueba distintas ofertas publicadas en LinkedIn, se fija en los salarios ofrecidos, a pesar de no fiarse del todo de su transparencia.
Ressler admite que una conversación abierta sobre expectativas salariales no es lo más cómodo, pero llevarlo a cabo "hace que sean cuales sean los miedos sobre el sueldo estos se disipen, y sabiendo que todos mis compañeros y yo estamos en el mismo barco". Volviendo a Workman, esta aplaude actitudes como la de Ressler y otros muchos miembros de la 'Generación Z', pues demandan mayores salarios para protegerse de una elevado inflación que aumenta el coste de vida.