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Este será el sueldo del Rey Carlos III y lo que pagará de impuestos
- El monarca mantendrá el salario que recibía su madre Isabel II
Cristian Gallegos
Tras el fallecimiento de Isabel II la semana pasada, el recién nombrado Rey Carlos III ascendió al trono y se hizo cargo de la corona británica. Por ello, recibirá un sueldo anual similar al de su madre. Si bien no tendrá que darle al gobierno ni un centavo de impuesto de sucesiones, el monarca tendrá que renunciar a algunos activos importantes y tendrá que pagar el impuesto sobre la renta, una tradición que su madre comenzó en la década de 1990.
Según han revelado medios británicos, el nuevo Rey cobrará aproximadamente 98 millones de euros anuales, unos 8 millones 100 mil euros al mes. Una cifra similar a la que recibía su madre recientemente fallecida.
De esta forma, Carlos III asume el título de duque de Lancaster y su ducado correspondiente, valorado en 641 millones de libras esterlinas o casi 750 millones de euros. El ducado se estableció en el siglo XIII para pasar de monarca a monarca y proporcionar una fuente estable de ingresos para la familia real, los cuales, gracias a una ley aprobada en 1990 por el primer ministro John Mahor, se exenta el pago de impuesto de sucesiones a quien reciba la corona, detalla Fortune.
Impuestos y renuncia a activos
Pese a que no tendrá que pagar ningún impuesto por haber heredado un patrimonio de 750 millones de euros, el nuevo monarca tendrá que renunciar a algunos activos importantes.
Al asumir el título de duque de Lancaster, Carlos III tuvo que ceder su título anterior de duque de Cornualles a su hijo primogénito, el príncipe Guillermo.
El ducado de Cornualles, también diseñado como una fuente de ingresos adicional para sus propietarios, es bastante "valioso". El año pasado, el ducado valía un poco más de 1,15 mil millones de euros, y generó un ingreso anual personal para Carlos de 26,5 millones, según cifras entregadas por Fortune.
También es probable que el Rey continúe pagando el impuesto sobre la renta, una tradición que su madre comenzó en la década de 1990. En 1992, la reina Isabel II acordó pagar un impuesto voluntario sobre los ingresos que recibió como duquesa de Lancaster.
Como parte del arreglo, el príncipe Carlos de Gales y el duque de Cornualles acordaron hacer lo mismo. Ese tampoco es un pago de impuestos insignificante, ya que los ingresos anuales del ducado ascienden actualmente a casi 28 millones de euros.