Actualidad
Aviso a autónomos: cuidado si utilizas la publicidad de Google para anunciar tu negocio
- Se acabará tal y como se conoce a finales de este año
- Los pequeños negocios tendrán que buscar otra alternativa
Pablo Escalona
Los autónomos llevan varios años dándose a conocer a través de la publicidad. Nunca un pequeño negocio había tenido la posibilidad de difundir su imagen a tantas personas por un coste tan bajo como hasta ahora, con la publicidad en internet. Sin embargo, hace relativamente poco, Google anunció una nefasta noticia para el colectivo: se acaban las cookies.
"¿En qué afecta a mi negocio que Google retire las cookies de su navegador?", deben preguntarse muchos autónomos. La respuesta es sencilla: se acabó la publicidad online como hasta ahora se conoce.
Muchos trabajadores por cuenta propia recurrían a campañas de anuncios de Google para aparecer en las búsquedas de su público objetivo o dentro de las webs que más visitaban. Esto era posible porque el gigante de los buscadores de internet poseía información básica de cada usuario gracias a las cookies: edad, sexo, gustos, preferencias, páginas recurrentes, productos deseados.
Sin embargo, a partir de ahora, esta segmentación va a llegar a su fin. De hecho, Google anunció que a finales del año pasado acabaría con las cookies, una iniciativa que se ha tenido que posponer hasta finales de 2022 debido a la carencia de una solución alternativa, tal y como explica a elEconomista Sergio Suárez, Martech Managar de Omnicon Media Group, una agencia de publicidad que trabaja con empresas como McDonald's, Campofrío, Audi o Volkswagen.
¿Cómo podrán publicitarse los autónomos?
En primer lugar, cabe destacar que las cookies que se acaban serán las de 'terceros', mientras que permanecerán las de 'primeros'. ¿Qué quiere decir esto? Básicamente, los autónomos podrán seguir viendo que tipo de público entra a su página web. Sin embargo, no podrá utilizar la información que Google tiene sobre estas personas en otras páginas.
Es decir, los pequeños negocios podrán saber quién entra en su página pero no podrán lanzar una campaña de publicidad de Google directamente a ellos, como hasta ahora venían haciendo.
Por este motivo, Suárez plantea una solución a este problema. Todos aquellos autónomos que quieran seguir lanzando su publicidad a un público concreto, cuyas preferencias estén alineadas con la oferta del negocio, tendrán que cambiar de estrategia.
Para poder concretar el target al que irá dirigida la publicidad deben empezar a solicitar los datos a sus usuarios. "¿Cómo puedo hacer esto?", se preguntarán muchos autónomos. Este experto propone varias opciones.
En primer lugar, es buena idea empezar a escribir un newsletter que poder ofrecer a los usuarios, una recopilación de noticias e ideas interesantes y atractivas con las que poder atraer al público. Una vez conseguida la atención del usuario será el momento de solicitar su correo electrónico para enviar la publicación periódicamente a su e-mail. De esta manera, el autónomo ya contará con la dirección del cliente para poder mandarle anuncios concretos, dirigidos a sus gustos y preferencias.
Otra opción es crear programas de fidelización, ofertas interesantes para clientes recurrentes. Para que el usuario pueda acceder a estas ofertas, tan solo será necesario que proporcione su correo electrónico o su número de teléfono. De tal forma, que el autónomo vuelva a tener acceso a la dirección de e-mail del cliente para enviarle sus anuncios.
Tal y como explica Sergio Suárez, estas opciones no sustituirán a la gran ventaja competitiva que aportaban las campañas segmentadas de Google. Sin embargo, "quien no haga esto no va a poder hacer publicidad de calidad, ya que no estará optimizada", dice. "Por este motivo, tendrán unos sobrecostes que no podrán cubrir porque no alcanzarán a usuarios de calidad. Si se ponen a invertir en la solución de Google –publicidad a grandes segmentos de población-, será como tirar flechas al aire a ver, si con suerte, cazan a algún cliente. La idea es personalizar la publicidad", conluye el experto.