Estos son los motivos por los que Hacienda vendrá a hacerte una inspección si eres autónomo
elEconomista.es
El colectivo de autónomos está acostumbrado a vivir entre libros de cuentas. Sin embargo, hay ocasiones en los que estos profesionales cometen algún error a la hora de registrar sus operaciones, lo que despierta el interés de Hacienda. Para descubrir estas irregularidades, el fisco cuenta con una herramienta: la inspección. Este colectivo es uno de los más vigilados del tejido empresarial español, sobre todo por la facilidad con la que se pueden dar casos de economía sumergida en estos estratos.
De hecho, con la aprobación de la nueva Ley contra el Fraude, estas inspecciones se han intensificado. Ahora, Hacienda ha puesto el foco en el efectivo que controlan estos profesionales, por ejemplo. No obstante, existen varios motivos para que un inspector acuda al negocio de un autónomo.
Solicitar un NIF intracomunitario
Hacienda anunció recientemente que aumentaría la intensidad con la que investiga los casos de 'empresas buzón'. Compañías que cursan fraudulentamente sus altas en otros estados miembros de la Unión Europea mediante la creación de estructuras empresariales sin actividad real.
Por este motivo, solicitar un NIF intracomunitario puede ser indicio de estar llevando a cabo esta práctica fraudulenta. No obstante, en la mayoría de los casos solo se tratará de una comprobación de datos, donde el autónomo tendrá que justificar la necesidad de este documento.
No haber presentado una declaración
Precisamente, ahora que ha pasado la campaña de declaración de la Renta, la inspección está pasando lista para ver si todos los autónomos han presentado sus cuentas. En este sentido, salvo que no se alcancen las cantidades mínimas para tener esta obligación, siempre será necesario llevar a cabo este trámite.
Devoluciones tributarias demasiado altas
Al realizar las declaraciones, los autónomos tienen la posibilidad de recibir una devolución por parte de la Administración. El problema aparece cuando estas cantidades son excesivamente altas. Esto despertará el interés de Hacienda, quien se fijará en que todos los cálculos estén correctamente realizados o que se hayan incluido demasiados gastos deducibles.
No declarar las subvenciones
No todas las subvenciones se reciben bajo la obligación de declararlas. Sin embargo, existen algunos tipos de ayudas que si son de obligada declaración y tendrán que pasar por tributo. Además, el fisco pondrá el ojo en que estas subvenciones se hayan registrado correctamente en los libros de cuentas.
Descuadres entre modelos trimestrales y anuales
Los inspectores de Hacienda ponen el foco en las declaraciones de impuestos que realiza el autónomo, comprobando que los modelos presentados a lo largo del año y el que se presenta a final del ejercicio económico comparten los mismos datos.
Es interesante que los autónomos automaticen estos procesos, aunque con la nueva Ley contra el Fraude ya no se podrán utilizar softwares de doble uso.
Incluir demasiados gastos deducibles
Incluir gastos deducibles que no estén relacionados con el negocio va a implicar que un inspector se presente en la puerta de la empresa. Hacer pasar por gastos derivados de la actividad el agua, la gasolina o las comidas de la vida personal es una infracción que supondrá una importante multa.