15 Aniversario

Los concesionarios, obligados a reinventarse ante la venta 'online'

  • Las redes invertirán en digitalización para potenciar otros servicios

Ankor Tejero

Las redes de concesionarios ha pasado en los últimos 15 años de ser una parte trascendental en el proceso de compra de un vehículo a encontrarse con los los fabricantes, los cuales han decidido embarcarse en la venta digital, con el objetivo de quedarse parte de estos beneficios.

En 2007, el sector de los concesionarios contaba con un total de 3.056 concesionarios independientes y empleaba a 180.202 trabajadores, una cifra que no se ha vuelto a alcanzar, según datos de la patronal de los concesionarios (Faconauto). Por aquel entonces, la ratio de rentabilidad sobre la facturación de los concesionarios se situaba en el 1,51% y la facturación del área de vehículos nuevos alcanzó los 41.957 millones de euros. A excepción de la rentabilidad, que se superó en los años 2016, 2017 y 2018 (con rentabilidades de 1,58%, 1,80% y 1,83%, respectivamente) ninguna de las demás magnitudes ha conseguido equipararse a las registradas hace casi tres lustros. Durante los siguientes cinco años, tanto el número de empleados como la facturación se desplomaron como consecuencia del impacto de la crisis financiera. En el caso de la rentabilidad, en los años 2008, 2011, 2012 y 2013 los concesionarios cerraron con pérdidas. En 2013, el empleo en el sector empezó a recuperarse, con un incremento del 0,7% en el número de empleados, hasta alcanzar los 131.313 trabajadores, mientras que la facturación registró un alza del 10,5%, hasta los 24.458 millones de euros.

Proceso de transformación

El sector se halla sumido en un proceso de transformación en el que las redes de concesionarios se ven obligadas a modificar sus modelos de negocio por parte de los fabricantes de vehículos. Uno de los últimos grupos en romper los contratos que tenía vigentes con las redes ha sido Stellantis. El consorcio francoitaloamericano, fruto de la fusión entre PSA y FCA, ha cancelado todos los contratos de venta y distribución que tiene con sus concesionarios europeos, debido a los cambios medioambientales y normativos que están impactando en el modelo de distribución de la industria. En España, esta decisión afecta a 129 empresas concesionarias, las cuales se verán obligadas a cesar su actividad, del total de 329 con los que cuenta el consorcio en nuestro país, siendo las redes de FCA (Fiat, Alfa Romeo, Jeep, Lancia, Abarth y Fiat Professional) y Opel las más afectadas.

Evolución del empleo y la facturación de los concesionarios

Asimismo, el fabricante sueco Volvo Cars, propiedad del grupo chino Geely, anunció a principios de este año que sus ventas serían online a partir de 2030. De esta manera, se eliminarían los distintos descuentos aplicados por las rede y se equipararían los precios de los modelos en todos los mercados.

Así, toda esta situación provocará una nueva realidad en las redes de concesionarios. Las compañías necesitarán invertir en digitalización con el objetivo de potenciar otro tipo de servicios, bien sea a través de la electrificación o a través de la gestión del dato. Bien es cierto que el área de posventa seguirá siendo necesaria, aunque el sector se encamina hacia la electrificación por lo que las redes tendrán que apostar por formación para poder proveer estos servicios. El área del taller también tendrá una parte importante del negocio, aunque a medida que se vayan prohibiendo los vehículos de combustión interna (diésel y gasolina), su capacidad mermará.

De lo que no hay duda es que, a medida que el sector del automóvil se encamina hacia la electrificación, las redes de concesionarios seguirán el mismo camino, por lo que las redes perderán fuerza productiva, más aún cuando los fabricantes decidan quedarse con una parte del pastel.